Mercedes Vitoria comienza a producir los primeros prototipos de la furgoneta eléctrica

En paralelo a esa carrera por tener las obras de la plataforma VAN.EA en operación, el fabricante germano también se afana en desarrollar el propio producto: la furgoneta. Y aquí los operarios de Mercedes Vitoria han empezado ya a testar los primeros prototipos de esos vehículos que definirán la nueva era. Una labor que se lleva a cabo con secretismo pero que confirman distintas fuentes consultadas por EL CORREO tanto de la fábrica como de las subcontratas, que hablan de dos etapas en ese desarrollo de las piezas vitales de la futura furgoneta.

En la primera de ellas, llamada B-Phase, los distintos proveedores empiezan a preparar, en un estado aún muy embrionario y con piezas producidas 'ad hoc' –no elaboradas en serie–, los primeros modelos de prototipo, donde se eliminarán los fallos más evidentes. Después se llegará a lo que en el argot interno se identifica como 'Pro', una especie de prototipos más perfeccionados de esas furgonetas con piezas listas para ser lanzadas en masa. En esta segunda etapa es donde se pretende eliminar todos los fallos antes de empezar a producir la futura furgoneta en masa.

Algunos de los proveedores ya han empezado a elaborar las piezas de la primera etapa (las de ensayo) y dentro de la Avenida de Los Huetos se han fabricado con ellas más de 20 chasis del futuro modelo. Según explican fuentes ligadas a estos procesos, las pruebas de la B-Phase se llevan haciendo desde la segunda quincena de marzo y la dirección ya ha hecho alguna comunicación interna al respecto.

Más adelante, en septiembre, Mercedes pretende iniciar las pruebas 'Pro'. La idea con la que trabaja la dirección de la factoría es empezar a testar la fabricación de esos futuros modelos a partir de ese mes. Sería entonces cuando se revisaría más en profundidad el proceso de producción, que incorporarán aluminio en vez de acero –Gestamp, uno de los principales proveedores, juega un papel clave en este punto– y se validarían todas las labores de la planta vitoriana.

Si se cumplen las previsiones, habría tres hitos en esta segunda fase de pruebas: una primera, en septiembre, se dedicaría a validar el grueso del trabajo, otra haría coches con piezas de fabricación y calidad de serie y una tercera probaría la capacidad de producción de las líneas. En la actualidad ya hay algún monovolumen de lujo –los que se empezarán a fabricar el año que viene– cargado en la lista de pedidos, pero todavía es testimonial.

Lo que desarrolla ahora la factoría alavesa no es la punta de lanza en el desarrollo de estos modelos. La multinacional de la estrella ya está testando prototipos acabados en otras factorías. De hecho, a principios de marzo Mercedes ya difundió imágenes de una furgoneta 'full-electric' durante unos ensayos en Suecia con los futuros modelos en las condiciones más extremas. Antes, en octubre de 2024, se hicieron públicas las primeras imágenes. Hasta ahora, los vehículos han aparecido con pintura de camuflaje –algo habitual– para mantener la exclusividad de las innovaciones adoptadas frente a la competencia.

Se espera que este mes Mercedes dé a conocer nuevos detalles de la llegada de la plataforma VAN.EA. En su última comunicación al respecto, del pasado 3 de marzo, la firma con sede en Stuttgart decía que en sus nuevos monovolúmenes «se mezclarán materiales elaborados de forma tradicional con elementos de diseño hipermodernos y tecnológicos tan elegantes como inesperados». «Más detalles, en abril», prometía. Se fabricará en Vitoria con nuevas furgonetas de combustión que llegarán con la plataforma VAN.CA, que permite compartir hasta el 70% de sus piezas con las eléctricas.