El ERE de Aernnova se zanja con 55 despidos tras las 27 salidas voluntarias
La dirección de la planta de Berantevilla acepta 14 prejubilaciones y 13 bajas incentivadas. La rescisión de los contratos se producirá el 1 de febrero
El sector aeronáutico ha sido uno de los grandes perjudicados en Euskadi por las consecuencias económicas de una crisis sanitaria de la que ahora hace ... un año empezó a haber noticias, pero que arreció con fuerza a partir de marzo. Los expedientes de regulación de empleo han llegado a las principales industrias vascas con un impacto directo en las plantillas: más de 250 personas de producción y oficinas saldrán de las plantas de ITP Aero, Alestis, Aciturri o Aernnova.
Precisamente, en la factoría de esta última compañía en Berantevilla el ERE de extinción se ha zanjado definitivamente con 55 despidos de trabajadores, que a partir del 1 de febrero dejarán de pertenecer a esta firma dedicada a la construcción de grandes aeroestructuras para clientes como Airbus o Embraer. Así se lo trasladó la dirección al comité de empresa en una reunión en la mañana de Nochevieja.
La cifra inicial planteada por la compañía de 101 salidas -para «defender la supervivencia de la empresa adecuándola a la nueva realidad del mercado para los próximos años», argumentó Aernnova al presentar el ERE- se redujo en un primer momento a 82 y ahora se queda en 55, después de que 27 empleados se hayan adherido al plan de salidas voluntarias. Esta factoría cuenta en la actualidad con más de 450 trabajadores.
De estas 27 bajas, 14 serán a través de prejubilaciones de personas a partir de 58 años y que percibirán el 65% de su retribución bruta. Mientras que los otros 13 trabajadores aceptan las bajas incentivadas propuestas -uno de ellos con opción a retorno, para cubrir una vacante que debería producirse en el año 2025- con una indemnización equiparable a la del despido improcedente y que en el mejor de los casos podría llegar a 100.000 euros.
El Gobierno vasco acusa al comité de protagonizar «actos de acoso y violencia inaceptables» contra quienes negociaban el ERE
Nueve días de huelga
Aunque en este sentido, portavoces sindicales han venido asegurando desde que se conoció la oferta que esa cantidad es «irreal, ya que se cobra en proporción al salario y en casi ningún caso se superarían los 50.000 euros». Los representantes de los trabajadores anuncian para enero un total de nueve días de huelga e incluso realizarán un encierro «en defensa del empleo y contra los despidos».
«Queremos volver a advertir de nuevo a las instituciones para que se impliquen de una vez por todas a través de Inspección de Trabajo y pongan todos los mecanismos a disposición para evitar los despidos», añade el comité, que denuncia que el departamento de Industria del Gobierno vasco «haya cancelado la reunión prevista para el 4 de enero justificando que las protestas que estamos llevando a cabo no resultan de su gusto».
Precisamente, el Gabinete Urkullu se defendió ayer de estas acusaciones y aseguró que el comité de Aernnova en Berantevilla ha estado protagonizando «actos de acoso y violencia inaceptables» contra algunos de los directivos que han negociado el ERE resuelto sin acuerdo.
«Todas las reuniones solicitadas» por parte de los sindicatos «se han estado manteniendo desde una actitud de máxima colaboración», aclaran fuentes del Departamento de Desarrollo Económico. Y la «única excepción» a la hora de celebrar estos encuentros ha sido el aplazamiento del próximo lunes, que se debe a «la beligerancia con la que está gestionando este proceso -en alusión al comité-, habiendo protagonizado 'scratches' hacia personas y directivos y hacia activos materiales de la empresa».
Las 82 salidas en Aernnova -55 despidos y 27 bajas voluntarias- se suman a las 87 rescisiones de contrato en ITP Aero, otras 77 salidas en Alestis -56 de ellas de manera drástica- y once más en Aciturri.
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