Los economistas critican que la banca aproveche la situación para cobrar por los depósitos
Sólo un 25% lo estima justificado por la presión de los tipos de interés negativos y otro 25% vería sólo «acertada y lógica» una medida así para los grandes patrimonios
Los economistas vascos se muestran críticos con la medida que parece que se avecina, que las entidades financieras cobren también a los clientes particulares por ... sus depósitos. En el último Ekonometro, encuesta que realiza el Colegio Vasco de Economistas entre sus asociados, el resultado arroja que casi el 50% considera que esta medida «se debe a que están intentando aprovechar esta situación para ampliar sus ingresos derivados de cualquier servicio, como se hace con las comisiones».
Tan sólo un 25,3% de los encuestados justifica la medida en base a «la actual coyuntura de tipos interés negativos» y otro 24,8% aboga porque este tipo de cobro no se generaliza entre todos los clientes, ya que estiman que sólo sería una medida «acertada y lógica» si sólo se aplica a «clientes cuyos depósitos superen cierto umbral».
La encuesta para la elaboración del Ekonometro de diciembre de 2019, que ha sido dado a conocer este martes por los responsables del estudio Mercedes Vallejo y Joseba Barandiaran, se realizó entre el 26 de noviembre y el 18 de diciembre y respondieron a la misma 535 economistas.
Dentro de este colectivo profesional el más comprensivo con las comisiones por los depósitos, según explicó Barandiaran, proceden de los que trabajan en el mundo financiero, mientras que los que muestran mayor oposición trabajan en el sector público o la enseñanza. En el segmento profesional más relacionado con la contabilidad la totalidad sólo respalda esta medida si afecta a las rentas altas.
Otra de las cuestiones de actualidad que ha analizado el último Ekonometro es la necesidad de que se regule la actividad del taxi y de las plataformas de coches con conductor, tipo Uber, pero sin especificar en qué sentido, si equiparándolas o primando unas sobre otras. Lo que llama la atención es que los encuestados piden una regulación nacional o europea cuando precisamente estas cuestiones han sido delegadas por dichas instancias hacia las comunidades autónomas o regulaciones locales.
La economía crece menos
El Ekonometro, como su propio nombre indica, tiene una parte dedicada exclusivamente a la evolución de la economía, que es la base de continuidad del estudio. En este contexto, la conclusión principal que han destacado Vallejo y Barandiaran es que los economistas vascos perciben que la economía seguirá creciendo y creando empleo, pero mucho más débil que en ejercicios precedentes. Así, el índice se mantiene en valores positivos -en un 1,3%- pero se trata de «del índice más bajo de los cinco años y medios que se lleva realizando el estudio», explicó Vallejo. De cara a los próximos seis meses, casi el 39% de los encuestados cree que la situación económica empeorará y sólo un 17,2% cree que mejorará algo y un exiguo 0,2% que el avance será sustancial.
Respecto de la creación de empleo la tónica discurre por rumbos similares son más los que consideran que el paro aumentará un poco (40,5%) o se mantendrá en los niveles actuales (36,8%).
De cara a aumentar la competitividad de la economía vasca, los factores determinantes, según los economistas vascos, son la inversión en I+D+i y la reducción de los costes laborales, factor este último porque pasa a ser el determinantes para el colectivo de los autónomos cuyas mayores preocupaciones son precisamente los salarios y la presión fiscal. Hay que tener en cuenta que en el momento de la realización de la encuesta estaba apunto de aprobarse la primera subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 900 euros, que además este mes de enero ha vuelto a incrementarse hasta los 950 euros.
Sin embargo, el economista Joseba Barandiaran considera que la subida del SMI tiene un efecto acotado en Euskadi, donde «hay menos trabajadores vinculados al SMI que en otros lugares».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión