Las diputaciones recaudaron 690 millones menos de lo previsto el año pasado
Las devoluciones a los mutualistas, el fraude de hidrocarburos y la caída del IVA provocan que las haciendas no cumplan sus presupuestos
Hacía ocho años desde la última vez que las haciendas vascas se quedaban sin cumplir sus previsiones de ingresos por la recaudación de impuestos. La ... última vez, con excepción de 2020 -gravemente afectado por el confinamiento-, fue en 2016. Las diputaciones cerraron el pasado ejercicio con unos ingresos tributarios que ascendieron a 18.309 millones, 690 millones menos que los 19.000 que estimaron para diseñar sus presupuestos. Un incumplimiento que se explica por tres elementos: el impacto de los mutualistas, el fraude en el comercio de hidrocarburos y una caída en la recaudación del IVA.
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Las cantidades que las diputaciones han tenido que abonar por retenciones mal aplicadas en el cobro de la pensión de miles de mutualistas han ascendido a 761 millones -400 en Bizkaia, 250 en Gipuzkoa y 111 en Álava-. Los ejercicios afectados han sido cuatro en Bizkaia y Gipuzkoa y cinco en Álava. El importe total es más de un 4% de toda la recaudación, con lo que se trata de un buen mordisco que, de no haberse dado, sí hubiera permitido alcanzar el objetivo.
El empleo sigue fuerte y eleva cerca del 10% las retenciones del IRPF en las nóminas de los trabajadores
Otro de los elementos extraordinarios que han afectado, especialmente a Bizkaia, ha sido el fraude de los hidrocarburos. Se trata de un procedimiento ilegal por el que algunas compañías realizan operaciones de venta de combustible y disuelven la sociedad antes de presentar la declaración trimestral del IVA, que queda sin abonarse a Hacienda. La Diputación de Bizkaia ha señalado el impacto de este procedimiento, que ha aflorado con una caída en la recaudación de IVA del 10,7%. El mes pasado, el Gobierno de España tramitó una modificación, que se aplicará también en Euskadi, y que obliga en estas operaciones a liquidar el IVA mensualmente, con lo que se reduce la ventana temporal para cometer el fraude.
El Impuesto sobre el Valor Añadido, además, ha acusado el enfriamiento del consumo que en Euskadi se ha venido registrando a lo largo del ejercicio. En Gipuzkoa, cerró el año con un descenso del 2,5%, mientras que en Álava la caída ha sido del 4,2%.
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Solidez fiscal
En total, esos 18.309 millones de la recaudación fueron solo un 0,5% más que en 2023. Una cifra que representa una evolución que se mantiene plana, pero sólida gracias al buen comportamiento del empleo. El IRPF ha sido uno de los motores fiscales. Los ingresos forales por las retenciones en las nóminas han subido un 6,6% en Bizkaia, por un 7,9% en Álava y un 9% en Gipuzkoa. Además, la recaudación por el cobro de dividendos y beneficios por las inversiones que realizan los ciudadanos ha escalado por encima del 40%.
Los beneficios empresariales, gravados en Sociedades, también han presentado una buena tónica con subidas del 4,8% en Álava, el 15,8% en Gipuzkoa y el 2% en Bizkaia.
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