CAF reclama condiciones de competencia «equitativas» en las licitaciones europeas

Ojinaga realizó esta reflexión durante la Junta de Accionistas que celebró la empresa beasaindarra ayer en su sede en Beasain. «La industria europa de suministro ferroviario necesita no solo una financiación constante y a largo plazo, como la que ha venido teniendo, sino que, además, son precisas normas simplificadas, previsibilidad y condiciones de competencia equitativas en materia de licitaciones y contratación pública, el conocido 'level playing field'», recalcó.

Añadió que en este último apartado, el de las condiciones de competencia equitativas, «donde tradicionalmente hemos advertido del riesgo asociado a fabricantes externos a la UE que no juegan con las mismas reglas, habremos de añadir ahora, a la luz de los recientes acontecimientos, un nuevo alcance, que incluye el 'fair play' interno entre los distintos países de la propia Unión».

Unas palabras que pueden entenderse después de que Bélgica suspendiera un contrato a mediados de abril de 1.700 millones con CAF tras las presiones y los recursos presentados por las competidoras, la francesa Alstom y la alemana Siemens, y sobre la que la empresa de Beasain ha preferido no pronunciarse hasta ahora. Se trata del mayor contrato de CAF de la historia.

Ojinaga apuntó que «la nuestra es una industria de largo plazo, donde la capacidad de estar en la vanguardia tecnológica marca la diferencia, y donde resulta difícil quemar etapas y recuperar, permítaseme la metáfora, aquellos trenes que se dejaron pasar».

El consejero delegado destacó que «son las decisiones tomadas hace ahora más de 20 años, las que hacen que en este momento CAF domine las tecnologías críticas de los sistemas de movilidad, y son las decisiones que ahora tomemos las que marcarán el futuro de CAF en los siguientes 10 años».

Pero apuntó que no se despistarán de sus objetivos y del camino trazado en los últimos años y que tan buenos resultados ha dado a la compañía ferroviaria. «Nosotros seguiremos a lo nuestro, y junto a los programas de desarrollo digital y de competitividad, CAF continuará haciendo foco en sus otras dos grandes verticales tecnológicas: la descarbonización, de una parte, y la movilidad autónoma y automática, de la otra». De hecho, añadió que ambos programas de innovación han seguido adelante durante el último año y medio con resultados prometedores.

Tras haber cerrado el año pasado con unas ventas y una cartera de pedidos récord, el consejero delegado de CAF se mostró optimista respecto a este ejercicio. «Es cierto que el entorno geopolítico y macroeconómico actual es volátil y turbulento y que el mundo parece fragmentarse insistiendo en un proteccionismo del cual los aranceles no son probablemente sino la punta del iceberg. Pero no es menos cierto que hay tendencias subyacentes que favorecen nuestra industria».

De hecho, indicó que se prevé que el mercado ferroviario mundial mantenga sus niveles de crecimiento, y aumente un 3% anual en términos reales durante el resto de la década, y que Europa continúe liderando ese crecimiento, que fue de más del 7% entre 2021 y 2023. Y la firma beasaindarra remarca que está preparada para afrontar los nuevos retos que reclama el sector y también otros mercados, con lo que indica que se espera cumplir los objetivos marcados en el plan estratégico 2023-2026.

«Si en el ámbito ferroviario, la cartera de pedidos a cierre del ejercicio 2024 representaba cuatro veces la cifra de negocios, aportando una alta visibilidad respecto a las ventas futuras, el inicio de este año 2025 ha sido, además, excelente en contratación, con proyectos de volumen con un enfoque comercial selectivo tanto para el suministro de trenes como para la prestación de servicios de mantenimiento», destacó Ojinaga.

Una captación de pedidos que también está siendo alta en su filial de autobuses Solaris, por lo que CAF prevé que la recuperación de la rentabilidad registrada el año pasado, con una mejora de 32 millones en el resultado de explotación, tenga continuidad en este 2025.