Vaya por delante que a mí lo que realmente me preocupa es que Jon Rahm, con independencia del circuito que dispute, siga haciéndolo igual de ... bien que lo ha hecho hasta ahora. No tengo duda de que así será porque el golf es su pasión. Entiendo el enorme ruido mediático que ha generado su decisión porque es uno de los mayores -si no el mayor- contrato que se firma en la historia del deporte, pero conociendo al jugador el dinero, aunque suele ser un factor importante, en este caso no ha sido el único a la hora de dar el paso.
Publicidad
A los mortales seguro que se nos escapan muchas cosas en este asunto y Jon, si en algún momento lo cree oportuno, quizá las de a conocer. ¿Por qué digo todo esto? Pues simplemente porque él siempre ha sido un hombre que ha analizado y valorado muy a fondo todo antes de tomar decisiones y estoy seguro que esta vez también lo ha hecho. Ha sopesado pros y contras con su entorno.
Su apuesta por la LIV Golf saudí, como la de cualquier otro deportista, es una opción súper respetable. El deportista debe tomar las decisiones que considera más adecuadas para su futuro. Y Rahm no es el primero que decide dar el salto. Ahí están los ejemplos de Sergio García, Eugenio Chacarra, David Puig o los Dustin Johnson, Phil Mickelson, Louis Oosthuizen, Brooks Koepka y Bubba Watson, entre otros. Sin hablar de otras estrellas muy mediáticas como los Cristiano Ronaldo, Karim Benzema y un largo etcetera que han dejado Europa para unirse al proyecto de la Superliga saudí de fútbol.
«Los responsables del ambos circuitos tienen la llave del acuerdo y debe primar la sensatez»
Lo que está claro es que algo se mueve en el golf y la decisión de Jon puede resultar clave a la hora de acelerar las negociaciones entre el PGA Tour y LIV Golf en busca de un acuerdo. Llevan desde junio trabajando y no sería descabellado pensar que pueda llegar la entente antes de final de año, por muy próxima que esté esa fecha. Esperemos que así sea porque el futuro del golf necesita ese acuerdo. Debe primar la sensatez y sólo los responsables de ambos circuitos tienen la llave.
Publicidad
En caso de que no llegase la fumata blanca Rahm tiene asegurada su presencia durante mucho tiempo en los cuatro Grandes -Masters, US Open, el Abierto Británico y el PGA Championship-, que son los que realmente te convierten en el mejor jugador de la historia. El ranking mundial es algo relativamente moderno y Rahm ya tiene dos 'Majors' en su palmarés y seguro que vendrán más.
Respecto a su presencia en la próxima Ryder, espero y deseo que en los dos años que faltan hasta que se dispute la siguiente edición el conflicto estará resuelto pero, en todo caso, Estados Unidos ya deja jugar a jugadores que no están en el ranking y Europa debería sopesarlo. Rahm ya ha demostrado su compromiso con la Ryder.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión