Los palos aguan la fiesta al Sestao River

El hecho de que hubieran concurrido solo tres días desde que Unionistas tuviera la exigente y atractiva eliminatoria copera frente al Barça, obligó a Daniel Ponz a realizar muchos cambios en la alineación que dispuso en Las Llanas. El técnico llevó a cabo un total de ocho modificaciones, manteniendo solo a Ramiro Mayor, Carlos Giménez y Jorge Rastrojo. Mientras, Aitor Calle apostó por un once muy reconocible, con las únicas entradas de la nueva incorporación Antxon Jaso por Diego Mirapeix y la de Álex Carbonell por Aitor Aranzabe, respecto a su último encuentro, en el que empataron a uno contra un Teruel que no había ganado hasta esta misma jornada.

Desde antes de ponerse el balón en juego, ya prometía ser un duelo muy igualado, de mucha lucha entre dos escuadras con el mismo objetivo: la salvación. Los primeros compases vinieron a confirmar dichas expectativas. Ninguno de los dos equipos se hacía con el bastón de mando en un partido frenético, de mucha intensidad por las dos partes. A su vez, ambos eran cautos, no querían cometer riesgos y las defensas se imponían constantemente a los ataques. El primero que pudo testar al portero fue el cuadro charro, en el minuto 17. Alfred Planas entró al área por el costado izquierdo y realizó un disparo cruzado que tuvo la respuesta de una gran estirada de Sergi Puig, quién rechazó el esférico a córner.

La reacción de los verdinegros no tardó en llegar. Pese a que Unionistas demostró ser un equipo fiable, contundente y en buen momento, el Sestao River no se achicó. La primera oportunidad de marcar por parte de los sestaotarras la protagonizó Álex Carbonell solo cuatro minutos después de la de los salmantinos. Aunque la más clara para los locales fue una doble ocasión en el minuto 29, con disparos de Jon Cabo y Jon Guruzeta, que se toparon con un Pablo Cacharrón que evitó que pudieran marcar con dos buenas paradas. Tampoco ocurrió mucho más en las áreas hasta el paso por vestuarios. Lo único reseñable fue un testarazo de Jon Guruzeta tras un buen centro de Cabo, que se fue directamente a las manos del guardameta.

Después del descanso, el Sestao River dio un paso adelante. Estuvo más incisivo el conjunto de la Margen Izquierda. Jon Cabo tuvo una buena opción de poner a los suyos por delante nada más se reanudó el juego. Del mismo modo, Sergi Puig también tuvo trabajo, realizando varias intervenciones en este periodo. La balanza terminó por decantarse hacia el bando local con la expulsión de Ramiro Mayor a falta de un cuarto de hora del final, tras zancadillear a Dopi, cuando éste se quedaba solo ante el portero. Esa misma falta la estrelló Leandro contra el travesaño con un excelente golpeo. Cuatro minutos después, un centro de Gaizka que no encontró rematador se envenenó hasta el punto de dar en el poste. No sería la última. Corría ya el tiempo de descuento cuando Dopi volvió a estrellar un testarazo contra el palo, ante la incredulidad de jugadores y público asistente a Las Llanas, que veían como se les esfumaba otra buena oportunidad de sumar los tres puntos.