El Eibar sale entero de Oviedo y decidirá Ipurua

Si no puedes ganar, al menos no perder. A eso se agarró ayer el Eibar en la ida de la primera eliminatoria del play-off de ascenso a Primera División. En el encuentro disputado ante el Oviedo en el Carlos Tartiere primó la contención, sobre todo en los armeros, que no arriesgaron y buscaron volver con un resultado positivo conscientes de que les queda la baza de Ipurua para la vuelta. Al acabar mejor clasificados en la liga regular, a los de Joseba Etxeberria les valdría con volver a empatar para avaznar al último cruce.

Mientras el técnico de los ovetenses, Luis Carrión, sorprendió con un dibujo con dos delanteros centro como Alemao y Borja Bastón, Joseba Etxeberria fue fiel a lo que dijo en su comparecencia previa al choque. Sabiendo que la eliminatoria es de ida y vuelta, el de Elgoibar apostó por adelantar a Corpas al extremo e introducir en el once a otro defensa como Rober Correa. Orden y estructura diseñada para desafilar el ataque carbayón, al final bien desactivado.

El Oviedo, que como local solo ha cosechado dos derrotas y ha cedido siete empates en 21 partidos disputados ante su afición, saltó al campo con las ideas muy claras y se adueñó del encuentro desde el inicio. Poco a poco fue metiendo al Eibar en su área, pero quitando algún acercamiento con peligro, como el disparo que sacó Luca Zidane en la recta final del choque -el meta voló para desviar un cabezazo de Paulino y evitar la derrota-, los de Etxeberria tampoco sufieron en exceso.

La imagen de los aficionados armeros al final del encuentro, saltando en las gradas del Carlos Tartiere, resumen el encuentro. El Eibar ha aprendido de sus dos experiencias previas en el play-off de ascenso. El desenlace defnitivo tendrá lugar el miércoles en Ipurua a las 21 horas.