Borrar
Ewan Urain, en un partido. E.C.

Ewan Urain, un ariete de futuro

El delantero, de 19 años y 1,92 de altura, se estrenó en Segunda B este sábado tras superar unos problemas físicos que le habían lastrado desde la pretemporada. El organigrama técnico de Lezama espera mucho de él

Javier Beltrán

Lunes, 7 de octubre 2019, 16:40

Comenta

Ewan Urain se ha perdido las primeras seis jornadas por lesión, pero el delantero centro del Bilbao Athletic reapareció ante el Arenas, dejando notables sensaciones en sus diez minutos en Fadura. El organigrama técnico de Lezama espera mucho de este durangarra de 19 años y 1,92 metros de altura que ya llamó la atención de un club inglés hace unos meses. Con un cláusula baja, tiene un año más de contrato que puede ser ampliado por el Athletic por dos campañas más.

De padre vasco y madre británica, este espigado ariete se caracteriza por su juego de espaldas, el remate y una notable destreza en el área. Un delantero del perfil de Kenan Kodro. Estas condiciones le hacían parecer destinado este curso a ser la referencia ofensiva del filial en competencia directa con Andoni Tascón. Pero a 'yuen', como se pronuncia su nombre, que fue el máximo goleador del Basconia el curso pasado con 13 tantos, se le cruzó por medio una lesión muscular que le afectaba a un ligamento, lo que le ha mantenido orillado desde el final de la pretemporada. Hasta que hace una semana fue convocado ante Osasuna B. No saltó al césped. Su oportunidad llegó este sábado ante el Arenas. Por fin se estrenó en Segunda B. En el minuto 80 entró por Baqué, que ha asumido con bravura el papel de '9' pese a ser mediocentro ante los problemas físicos del propio Urain y de Tascón.

Miembro de la generación del 2000

Con el dorsal 21 a la espalda, tan solo dos minutos después de su irrupción, en su primer balón, controló el cuero y remató desde la frontal con finura, aunque su chut salió desviado por centímetros de la cruceta de Aulestia. Los centrales locales, Kaiser y Frau, se fijaron para vigilar al delantero durangarra, que caía a la banda izquierda para tapar la ausencia del relevado Jon Morcillo. No tuvo tiempo para mucho más, aunque dejó su sello, también para presionar la salida de balón arenera. En los últimos meses, pese a esta incómoda lesión que le ha hecho perderse las primeras seis jornadas, ha perseverado en fortalecer el tren superior, la lateralidad y la capacidad de reacción para rendir en esta competitiva Segunda B.

En la lectura del partido, su técnico, Joseba Etxeberria, destacó el trabajo «al principio» del derbi ante el Arenas de Baqué y «al final de Urain», para abanderar esas segundas jugadas en punta de lanza, que derivaban en «situaciones de peligro. Afortunadamente, de recibir ese empate, de balón parado también, pasamos a hacer el 1-2», narraba el míster del filial rojiblanco después de que Luengo decantase la balanza en un envite trabado en el que se tuvieron que ajustar el mono de trabajo.

Llegado a Lezama en cadetes procedente de la Cultural tras estudiar en la Ikastola Kurutziaga, donde también jugaba a pelota, forma parte de la famosa generación del 2000 de los Vencedor, Sancet, Córdoba, Cabo o Artola. Como campeón del juvenil de honor anotó 11 goles en 26 partidos más dos en Copa y pasó la prueba del algodón en Tercera División con el Basconia. Iban Fuentes, que suplió a Solabarrieta tras la promoción de Gaizka Garitano al primer equipo, apostó por él en un cambio táctico que relegó al banquillo a Azcona. Ahora ha llegado su momento en Segunda B, ya con balas de verdad y con la suerte de entrar en liza a favor de obra, con la flecha hacia arriba de un Bilbao Athletic instalado en la cima de la tabla a golpe de goles y versatilidad.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Ewan Urain, un ariete de futuro

Ewan Urain, un ariete de futuro