Doce partidos de sanción al portero del Aurrera de Ondarroa por agredir a un jugador del Abanto

En la trifulca postpartido intervino también otro jugador del Aurrera al que el órgano disciplinario de la Territorial le ha impuesto cuatro encuentros de castigo por agredir a otro jugador del Abanto. Ambos futbolistas del conjunto costero deberán abonar además sendas multas de 144 y 48 euros, respectivamente.

Por lo que respecta al incidente protagonizado por un aficionado ondarrés que profirió insultos y amenazas hacia un asistente del colegiado, Competición ha decidido resolver el asunto con una multa de 150 euros. Asimismo, el segundo entrenador del conjunto costero se perderá tres partidos, dos de ellos por menosprecio al trío arbitral.

El Aurrera, que desde el primer momento calificó de «inaceptables» los hechos, ha decidido acatar la sanción y no recurrir la misma. «Desde el primer momento decidimos que íbamos a asumir todas las consecuencias», señaló su presidente, Mikel Santiso, que consideró «adecuado» el castigo impuesto dada la gravedad de lo acontecido. El máximo mandatario ondarrés estimó, por otra parte, «positivo» que se haya exculpado al tercer jugador local de particicipar en la trifulca, «tal y como recogía el acta arbitral».

«Intentó mediar y parar la pelea y consideramos que es justo que se acepte en esos términos», explicó Santiso. En esa misma línea, dio también importancia al hecho de que no haya sanción en forma de cierre para Zaldupe por el incidente de un aficionado con uno de los asistentes del árbitro.

«Asumimos la multa, pero es importante recordar que no se puede meter en el mismo saco a toda la afición del Aurrera», resaltó Santiso, que reiteró su condena a los hechos. Tras el pitido final, el guardameta del Aurrera saltó la valla que delimita el campo y se fue directamente a por un jugador del Abanto que se encontraba en la grada.

Según la denuncia del club visitante, golpeó repetidamente a su jugador con puñetazos y patadas, lo que generó un tumulto en el que se vieron involucrados otros dos jugadores del Abanto y un futbolista más del equipo local. El resultado de la pelea con golpes de todo tipo dejó a un jugador del Abanto con policontusiones, lo que le obligó a acudir en dos ocasiones a urgencias en el hospital San Eloy.

Además, otro futbolista de este equipo sufrió un fuerte impacto en un ojo y tuvo que recibir asistencia médica. Las sanciones «nos parecen bien y esperemos que hechos así no vuelvan a producirse», apuntaron desde el Abanto tras conocer la resolución del Comité de Competición.