El Bidaideak gasta un comodín para pasar a semifinales

39 minutos y 53 segundos a remolque para ganar el partido. Lo tenía más que complicado el Bidaideak para pasar de ronda en su estreno en la Copa del Rey. El Gran Canaria se había escapado en el marcador casi sin despeinarse (2-12) y con ese hueco supieron administrarse los insulares hasta que cometieron el error de no rematar la faena y dejar con vida a un conjunto vizcaíno que nunca se rinde. Asier García emergió en modo gran capitán y con seis puntos seguidos en 47 segundos certificó el pase de los de Txurdinaga a las semifinales coperas.

Salieron los canarios a cancha más concentrados y frescos, y desde el primer momento dominaron el marcador, alcanzando una diferencia de 10 puntos (2-12) a los cinco minutos. Un par de acciones en la pintura de Luis Jasso, referente interior de los vizcaínos, conseguían menguar diferencias para llegar con un 8-14 al cierre del primer cuarto. Pero el cambio de acto para poco sirvió a los de negro, porque una y otra vez sus esfuerzos por anotar eran baldíos. Al descanso promediaban un 28% de efectividad en tiros de campo que no presagiaba nada bueno. Los 16 puntos conseguidos en los 20 primeros minutos (se repitió el 8-14) es su peor anotación en los últimos años. El panorama se oscurecía más al contrastar con la seguridad que mostraban los rivales grancanarios.

Pero si algo tenía claro el técnico Esteban Núñez en los vestuarios era que peor no podían ir las cosas tras la reanudación. Y aunque el juego no mejoró completamente, el acierto sí. Poco a poco fueron reduciendo distancias hasta llegar a situar el marcador en un 31-32 en el minuto 27 que parecía señalar por fin el cambio de rumbo en el encuentro. Pero cuando rozaban la remontada de nuevo una serie de errores en el tiro, aderezados con aciertos rivales, hizo que al último parcial se llegara con un decepcionante 31-39.

La diferencia se instaló pronto en torno a la decena (40-50), y pocos confiaban en que el semifinalista fuera el conjunto vizcaíno. Pero Bidaideak tiene un plantel amplio, con jugadores veteranos que saben moverse con el marcador en contra y dosis extra de presión. Núñez sacó a todos sus tiradores a cancha, limpiándola de centímetros, y punto a punto fueron rebajando el diferencial. Tres ataques decisivos de Asier, con respuesta roma de los insulares, obraron la gesta. Los bilbaínos lograban a siete segundos del final su primera, única y definitiva ventaja. Un intento a la desesperada de los canarios acabó contabilizado como el rebote con el que Manu Lorenzo cerró el partido.

La victoria permite pasar al equipo bilbaíno a semifinales, donde el 'rey de copas', el Ilunion, le espera esta tarde a partir de las 19.30.