Una deportista siria logra el billete para los Juegos con 11 años

El fenómeno de la precocidad en el deporte no es nuevo, pero siempre asombra. La última en escribir un capítulo en este terreno ha sido la siria Hend Zaza, jugadora de tenis de mesa que acaba de sacarse el billete para los Juegos Olímpicos de Tokio con tan solo 11 años y dos meses. Será así la benjamina de la cita japonesa después de arrebatarle tal condición a la skateboarder británica Sky Brown, que ya tendrá los 12 cuando arranquen las Olimpiadas.

Nacida el 1 de enero de 2009, la niña prodigio siria consiguió su plaza tras vencer el torneo clasificatorio de Asia Occidental celebrado en Jordania a la libanesa Mariana Sahakian, de 42 años. Toda una experta con la pala que no pudo hacer nada ante el empuje de Zaza, que pese a ocupar el puesto 155 del raking mundial logró un objetivo que hacía apenas unas semanas veía casi improbable.

Natural de la ciudad de Hama, al norte de Damasco, masacrada en los años ochenta, ha sabido triunfar y cumplir su sueño en un territorio fuertemente castigado por la guerra. Sin hijab, el velo árabe, con su coleta al viento y en pantalones largos, se ha convertido en el primer deportista menor de edad sirio en acudir a unos Juegos Olímpicos, y también en el primer jugador de tenis de mesa de su país en lograrlo. Arrancará su participación en las rondas previas el 25 de julio, si la expansión del coronavirus no altera las fechas. Un día antes podría ser la abanderada de Siria en la ceremonia de inauguración, algo que ya está barajando el Comité Olímpico de la nación árabe.

Pese a su corta edad no será el deportista más joven de la historia de las Olimpiadas, aunque sí la más benjamina de los últimos 52 años. La supera la patinadora de hielo rumana Beatrice Hustiu, que a sus 11 años y 158 días participó en los Juegos de Invierno de 1968. Mucho antes, en 1932, también tomó parte otra precoz patinadora, Cecilia Colledge, que acababa de cumplir 11 años dos meses y medio antes. A la pasada edición en Río de Janeiro acudió la nadadora de Nepal Gaurika Singh, con 13 años. Con esa misma edad en Barcelona'92 la clavadista china Fu Mingxia se colgó un oro.

Pero quien tiene el récord del más joven en luchar por una medalla en unas Olimpiadas es el gimnasta griego Dimitrios Loundras, bronce en barras paralelas por equipos en los primeros Juegos Olímpicos de la edad moderna, en Atenas en 1896, con 10 años y 218 días. Participante posteriormente en las dos guerras mundiales, nadie ha logrado subirse al podio de esta cita con menos edad.