Sin acuerdo para la eliminación o modificación de la lista de compensación

Los ecos del primer convenio colectivo del fútbol femenino en España siguen coleando tres meses después de haber logrado su firma, aunque continúa sin haber visto la luz en el Boletín Oficial del Estado. Lo que mantiene la polémica abierta, además de esto último y de que podría llegar a peligrar su viabilidad debido a la falta de ingresos tras la cancelación de la competición por la pandemia de Covid-19, es uno de sus artículos. Concretamente el 20, el que tiene que ver con la lista de compensación.

Esta es una cláusula que obliga al club que se hace con los servicios de una jugadora menor de 23 años, y que acaba ese año contrato, a pagar a la entidad de la que procede una cuantía en concepto de derechos de formación, que varía dependiendo del caso, sin seguir ningún criterio, y que puede llegar hasta los 500.000 euros. En dicha lista figuran 17 deportistas, dos de ellas del Athletic (Maite Oroz y Damaris Egurrola). El sindicato mundial de jugadores ya se pronunció hace unos días resaltando que esta indemnización se trata de una fórmula «contraproducente» ya que podría «obstaculizar significativamente el flujo de jóvenes talentos y el desarrollo de las jugadoras juveniles».

Más o menos en esa línea se encuentra otro sindicato, en este caso español, Futbolistas ON, que ya ha pedido su eliminación, asegurando que se debería de considerar nula por graves defectos, entre ellos un desfase en las fechas que la dejarían fuera de plazo, y el hecho de no haber salido todavía en el BOE. Además, hay tres equipos que no han firmado el convenio por estar fuera de la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (Athletic, Barça, y Tacón-Real Madrid), que no estarían obligados a acogerse a la lista hasta que no se publique oficialmente el documento y afecte a todos los que componen la Primera Iberdrola, pero que sin embargo sí cuentan con jugadoras en ella por las que reclaman ciertas cantidades.

Futbolistas ON ha terminado llevando el caso ante el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), celebrándose este viernes una reunión que ha concluido como empezó, sin acuerdo alguno. Los que promueven su eliminación se mantienen en su idea de que las jugadoras deben de quedar libres en su totalidad, «no podemos pretender profesionalizar el fútbol femenino y dejar escapar el talento», mientras que el sindicato mayoritario, AFE, pide que se establezcan criterios de modulación, en los que se tengan en cuenta, en otros aspectos, los gastos generados por la formación, la duración del contrato o el salario que venían percibiendo. Entienden que de no ser así, se podría poner en peligro el convenio.

Finalmente ambos sindicatos dieron el visto bueno a fijar un baremo no superior a 20.000 euros, pero fue entonces cuando la Asociación de Clubes del Fútbol Femenino señaló que no estaba capacitada para tomar una decisión sobre ello, por lo que todo ha quedado como al principio. El SIMA ha propuesto que esto se pueda resolver con un acuerdo mediante el cual la Comisión Paritaria del Convenio Colectivo establezca unos criterios objetivos que limiten la cuantía de las compensaciones establecidas por los clubes, «incluyendo un pronunciamiento sobre la actual lista de compensación». Una propuesta que ya lanzó la AFE, y que Futbolistas ON rechazó.

Este último sindicato ya ha anunciado que acudirá a la Audiencia Nacional para llevar a cabo la defensa de la anulación. «Seguiremos velando por los derechos de todas las jugadoras, y en este caso concreto por el de las menores de 23 años que hay en nuestra competición nacional, de manera que sean libres de elegir su futuro una vez que finalizan sus contratos. También pretendemos evitar la fuga de jóvenes talentos que inevitablemente se va a producir, ya que los clubes extranjeros no tienen que pagar nada«, resaltan. Y todo esto a un mes para que concluyan las vinculaciones laborales de muchas de ellas.