Aitana Rodrigo 'rompe' el crono y logra el título de España sub'23

Aitana Rodrigo vivió el sábado una noche inolvidable. Un salto de calidad que pocas veces se da en el mundo del atletismo. La velocista de Galdakao había demostrado en esta temporada bajo techo que se encontraba en un buen momento, que los entrenamientos decían que en sus piernas había una gran marca, y llegó al campeonato de España sub'23 dispuesta a todo. El 60 que había hecho la semana anterior en San Sebastián le habían dado una marca personal de 7.54 que la colocaban tercera en el ranking de las participantes, a 10 centésimas de Ona Rosell. Pero lo que sucedió ayer en Salamanca transportó a la velocista vizcaína a otra dimensión dentro del atletismo. Se puede decir que entró en las series de la mañana siendo una aspirante al podio y una gran promesa de este deporte y salió a eso de las 9 y media de la noche siendo campeona de España, plusmarquista absoluta de Bizkaia, décima en el ranking nacional de todos los tiempos y toda una realidad de la velocidad española.

Y todo gracias a una marca espectacular de 7,34 que le supuso mejorar en 20 centésimas su marca, algo que en 60 metros es una auténtica barbaridad, un registro que impulsa a Aitana Rodrigo a codearse con las mejores velocistas absolutas del momento y a ser una aspirante a todo en el Nacional de pista cubierta de dentro de dos semanas en Ourense.

Para entender lo que logró la vizcaína en la jornada del sábado hay que hacer un repaso cronológico de su actuación. La pupila de Valentín Rocandio arrancó por la mañana con una victoria en series y un registro de 7.66, muy destacado teniendo en cuenta su marca personal. Pero a las ocho de la tarde, en semifinales, ya reventó el crono. Aprovechando la bondad de la pista de Salamanca estableció 7,40, lo que suponía 14 centésimas de mejora ¡en una eliminatoria!. Quedaba por saber cómo asimilaría el esfuerzo, ya que la final estaba programada una hora y cuarto después. Pero la final resultó apasionante, con un duelo desde los tacos de salida con Ona Rosell que se mantuvo en toda la recta. Una centésima dio el título a la de Galdakao, y la pelea entre ambas les permitió dos marcas fantásticas. En el caso de Rodrigo, romper el registro de su paisana Cristina Castro, un 7.35 que se mantenía en lo alto del ranking provincial desde 1990. Solo la alavesa Blanca Lacambra queda ahora por delante a nivel vasco, con un 7.30 que se mantiene desde 1986 y que peligra en el Nacional de Ourense. No es de extrañar que la propia atleta reconociera que «todavía no asimilo lo que he hecho».

Para entender la progresión a nivel nacional de esta joven atleta nacida en 2000 -la más joven del podio de los 60 metros-, forjada en la pista de Elejalde por los consejos de Isidro Roscales y que ahora crece en Anoeta de la mano de Rocandio, solo hay que mirar los nombres que tiene por delante en el histórico español. Aitana está a 11 centésimas del récord de Sandra Myers, que data de 1990, a 10 de Onyia, a 6 de Gory Alozie y a solo 3 de María Isabel Pérez, la atleta española más rápida en los últimos 9 años y principal aspirante al título en Ourense. Pero vista la progresión de Rodrigo, se puede soñar en grandes cosas. A sus 19 años y si ha sido capaz de mejorar más de dos décimas en un invierno, se puede pensar que lo mejor todavía está por llegar.