Alavés 0-0 Osasuna

Un empate para seguir creciendo

Aunque también pudieron perder en unos minutos finales eléctricos en los que la madera también negó el gol a las rojillas. El Alavés fue mejor en la primera parte y la superioridad física navarra niveló la contienda en la segunda para firmar unas tablas intensas que pudieron saltar por los aires en los minutos de descuento.

Superado el 90, el cabezazo de Sara Carrillo chocó contra el larguero. En el 92 la rojilla Guallar se topó con el poste después de una buena acción individual. Noventa segundos para resumir la emoción de un derbi que, pese al empate en casa, debe servir para afianzar la progresión del equipo de Andrea Esteban, dominador durante varias fases del encuentro ante un adversario potente que se impone luchar por el ascenso, sólido cuando le tocó aguantar las acometidas navarras y tenaz para seguir buscando la victoria cuando el poderío físico rojillo amagó con meterle en su área.

La entrenadora albiazul dijo en la previa que su equipo debía intentar mandar desde el principio y la llegada por banda izquierda de Carrillo en el minuto 3 ratificó esa declaración de intenciones. Osasuna tiró de músculo para tratar de adueñarse del partido. Las caídas, los rechaces y las disputas eran de color rojo, pero el juego tenía tintes albiazules. Y se terminó imponiendo el balón. Las ocasiones de la primera parte tuvieron lugar en la portería de Maitane, que vio dentro el balón que Almu ajustó tanto a la escuadra que lo terminó escupiendo el poste (m. 16). Tampoco Carla Morera pudo perforar la puerta navarra en el rechace.

La entrenadora albiazul dijo en la previa que su equipo debía intentar mandar desde el principio y la llegada por banda izquierda de Carrillo en el minuto 3 ratificó esa declaración de intenciones. Osasuna tiró de músculo para tratar de adueñarse del partido. Las caídas, los rechaces y las disputas eran de color rojo, pero el juego tenía tintes albiazules. Y se terminó imponiendo el balón. Las ocasiones de la primera parte tuvieron lugar en la portería de Maitane, que vio dentro el balón que Almu ajustó tanto a la escuadra que lo terminó escupiendo el poste (m. 16). Tampoco Carla Morera pudo perforar la puerta navarra en el rechace.

Dominaban las vitorianas, que merecieron más en los primeros 45 minutos, pero su control se atascaba en los últimos metros. Lo probaron de lejos Alba Aznar y las propias Morera y Almu –destacada en la primera mitad–, pero al conjunto babazorro le faltó algo de claridad en la fase decisiva para traducir su control en un resultado positivo. Y en la segunda parte Osasuna elevó el ritmo. Probaron suerte las rojillas Carmen –remate flojo de chilena– y Celia, aunque el arco de Sofía no sufrió una angustia real hasta un remate de Aspiazu en un saque de esquina (m. 75).

El juego se había equilibrado y la clara superioridad física del conjunto pamplonica amenazaba con hacer el partido demasiado largo a las de Andrea Esteban. Pero las Gloriosas nunca se rinden. Y con la entrada de Laura Moreno, Judith y Olga encontraron frescura para volver a jugar en campo contrario. Moreno y Judith, de hecho, buscaron portería en un disparo lejano y un rechace, pero la mejor ocasión llegaría ya en el 90. En el excelente remate al larguero de Sara Carrillo, muy activa en ese tramo final del encuentro.

Ahí estuvo una victoria que a los puntos debería haber caído del lado vitoriano, superior durante bastante más tiempo que su rival, aunque, cosas del fútbol, en la jugada siguiente Guallar pudo echar por tierra el meritorio trabajo de las albiazules. Un empate, a la postre, de regusto agridulce. Otro paso más, aunque sea corto numéricamente, para afianzar la evolución que marcó la remontada ante el Dux Logroño y la clasificación copera.