El Alavés encarrila su objetivo a costa de un descafeinado Rayo

Cumplirá su propósito después de superar con creces a un Rayo Vallecano descafeinado. Llas madrileñas lo intentaron desde el primer minuto de partido, dejando su sello y mostrando el peligro que puede generar con tan pocas herramientas. Son colistas de la clasificación, con sólo 11 puntos, aunque sus sensaciones en las últimas semanas han ido a más, irónicamente desde la incorporación de Carlos Santiso como técnico del primer equipo, técnico que ha dado mucho de qué hablar desde su llegada a Vallecas.

A pesar de todo, su sello ha hecho efecto en la plantilla madrileña. Con Pauleta en banda, el Rayo dispuso de sus mejores ocasiones en el primer cuarto de hora de partido. Mikel Crespo ya avisó sobre el peligro que pueden generar en el juego aéreo. De esta manera llegó el 0-1 en el electrónico, con un centro de la mencionada Pauleta y que transformó Isadora con un testarazo que superó por alto a Ohale y Majarín. El tanto engrandeció al Rayo hasta el descanso y privó a las albiazules a la hora de mostrar su superioridad con la pelota. Algo que, por fortuna cambió a partir del descanso.

Tras el descanso, el Alavés se mostró sobre el tapete de Ibaia con otra mentalidad. Ane Miren hizo mucho daño desde los costados y Míriam, junto a Alba, desajustó una línea defensiva bien plantada por parte del cuadro vallecano, con pases en diagonal que hicieron mella en el rival. De esta manera llegó el empate en el electrónico. Carla Armengol, con un autopase que engaño por completo a Struck, centró al área pequeña para que Chamorro, con un cabezazo sin oposición, superase a Larqué.

A partir de entonces, la presencia del Rayo Vallecano no hizo más que disminuir. El Alavés Gloriosas se adueñó del encuentro y disfrutó de numerosas ocasiones que redondearon la actuación. Miku y Ane Miren anotaron los otros dos goles que certificaron un nuevo triunfo de un Alavés que llega a los 30 puntos y se aleja, casi de forma definitiva, de los puestos más peligrosos de la clasificación. El Rayo, un histórico del fútbol femenino, ve cómo su crédito en la máxima categoría se agota lentamente, una mala noticia para un equipo que posee tres ligas, una Copa de la Reina y tres presencias en la Champions League.