La venganza del equipo naranja en 'GH Vip': «Tenemos una guerra que librar»

Las espadas están en alto en esta extraña edición de 'GH Vip' en la que los concursantes van y vienen, como en aquella canción de Julio Iglesias, pero a ritmo de reguetón. Se fue Javier Fernández, y no pasa nada. Expulsaron a Marta Castro, y tampoco. Hasta la marcha de Gustavo, el chófer de María Teresa Campos, ha resultado irrelevante. La que ha marcado a la casa ha sido la ausencia de Alex Caniggia. El equipo naranja quiere vengar su eliminación disciplinaria y su objetivo es José Antonio Avilés.

«Yo me pongo en la ventana de mi casa y veo cadáveres pasar», advertía con ironía Laura Bozzo, líder del grupo que pide revancha. Su rival directo, Avilés, sigue serpenteando alrededor de propios y ajenos buscando sacar de quicio al más pintado. «Esta, en cuanto pueda, os corta la cabeza», malmetía sobre Carmen Alcayde a una paciente Bozzo. «Nunca me sobrestimes», avisaba la peruana que, no se sabe si por las palabras del polemista o por su cuenta, empieza a sospechar de sus propias compañeras. «Yo con el único que me entendía era con Alex. Y también con Javier y hasta con Gustavo», decía en el confesionario, expresando así sus dudas sobre Carmen y Naomi Asensi. Con ésta última no congenia. «Vengo a escupir veneno», afirmaba indignada la de 'La isla de las tentaciones' al saberse cuestionada por Bozzo. Y la veterana presentadora respondía en la distancia. «Ya me está hartando. Esa señorita no es para mí indispensable, por mí que se vaya a la mierda. Me siento más identificada con Jessica (Bueno)que con ella», le confesaba a Alcayde que trataba de calmar las aguas. «Yo voy a ir por mi cuenta, voy a ser independiente porque si no me va a volver loca», manifestaba Naomi. Pero no llegó la sangre al río. Bozzo y Naomi limaron asperezas. «Te quiero un montón. Si no, no te lo diría. Nunca te lo tomes como que estoy tratando de criticarte, estoy tratando de darte mis conocimientos de todas las batallas que he tenido. Tenemos una guerra que librar», aleccionaba la peruana a Naomi antes de fundirse en un abrazo. 

Pero Avilés insiste en dinamitar al grupo rival y aprovecha cualquier resquicio para exasperarles. Ejemplo. Toca madrugar para hacer una prueba y ataca a Naomi. «Te pasas la vida pintándote las pestañas y los ojos», agredía. La joven hacía oídos sordos. Y solo minutos después, ya en el juego, Avilés se dirigía en otras formas a la modelo. «Nunca te pido nada, pero ¿podrías hacerme un favor? ¿Me pintarías a mí los ojos?», solicitaba como si nada hubiese pasado. «No gasto ni una gota de maquillaje en tu careto», replicaba Naomi incrédula. Y así todo el rato.

Por lo demás, tras la debacle del premio final que ha perdido toda su esencia, la organización ha decidido recargar el bote haciendo pruebas absurdas que alimenten la recompensa. Y unos pocos miles de euros elevaron la cifra. Poco, pero algo es algo. Y Avilés, Michael Terlizzi y Alcayde siguen nominados, la audiencia ha decidido salvar esta semana a Laura Bozzo. ¡Ah! Y el jueves comienza la repesca de concursantes. Hay que repoblar la casa si quieren continuar unas cuantas semanas más.

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