Melyssa desvela el secreto de Tom en 'Supervivientes'

Hay personajes televisivos que deben pensar que la audiencia tiene el cerebro de un mosquito. Eso o son ellos los que no gozan de neuronas apropiadas y fabrican historias rocambolescas con tal de seguir en la brecha. Es el caso de Tom y Sandra. Como la relación del marroquí con Melyssa no ha dado juego suficiente en 'Supervivientes', la novia actual se desplaza hasta Honduras para zanjar la relación amorosa sin explicación convincente. Da la sensación de que ambos habían pactado algo semejante, utilizando la disculpa del acercamiento entre los ex, pero como este no se ha producido… ¡a inventar!

Primero se habló de que Sandra ya había puesto sus ojos en otro muchacho, un tal Julen. Ella niega la mayor. Entonces, ¿qué motiva su desenamoramiento? Pues que se ha dado cuenta de que es feliz sin Tom. Lo malo es que el programa ha decidido que Sandra pase unas vacaciones en la isla y esas jornadas han demostrado que ambos tienen más cuento que Calleja. «Me gusta despertarme a tu lado porque así mantengo la esperanza de que no me dejes», dice él ante un amanecer paradisíaco. Ella sonríe abrazándole, como sin darse cuenta de que deberían transmitir sensaciones contrarias.

La desfachatez es tal que sus propios compañeros cuestionan la historia. Ellos se indignan ante las opiniones, claro, pero todo apunta a que el montaje del que les acusan es más cierto que la estupidez humana. Y no se crean que se ruborizan al ser atrapados, no. Surge entonces la ira, el cabreo. «¿Cómo podéis pensar eso?», se extrañan con aspavientos sobreactuados. Pues porque el Goya no os van a dar por la actuación, sobre todo a ella. Además de Melyssa, Gianmarco ha sido el que más ha sospechado de la pareja. «Necesitas una carpeta para tener protagonismo, acercarte a Valeria o hacer algo», atacó Sandra al italiano. Tom, por su parte, asegura que las personas que piensan que lo suyo es un montaje les tienen rabia y envidia.

Llegada la hora de la despedida, Jordi González propuso a Sandra quedarse en la isla, pero la mujer afirmó que mejor otro día, que no era el momento. Además, debía pedir permiso a su madre y la progenitora, desde plató, dijo que ni hablar. Y es que solo unos días han bastado para destapar el cuento, cómo para aguantar más jornadas fingiendo. «Cuando llegue a España, soy la primera que va a estar en casa», prometió Sandra a un Tom que le declaraba amor eterno. Y para rematar la jugada, Melyssa, que se alejó de la historia, regresó con una bomba. La muchacha contó a sus compañeros, pensando que no la estaban grabando, que tres días antes de empezar el concurso, Tom le pidió una segunda oportunidad. Nuevo culebrón a la vista.

Por otro lado, las desterradas no están tan felices como acostumbran. Un ataque de lumbago ha postrado a Palito. «He sentido un dolor fortísimo en la espalda y no se me iba. No podía ni incorporarme», se lamentaba la joven de la dinastía Bosé. Lola, solícita, le anima a cuidarse. «No quiero que te levantes ni hagas esfuerzos porque puedo ser enfermera un día, pero no toda la semana», avisa. Ambas se complementan a la perfección y no sería de extrañar que de la dupla surja la ganadora del show. Ya veremos. ¡Ah! Y Omar habló con Anabel Pantoja y fue todo muy empalagoso.