Los personajes gordos no llegan al 4% en las películas y series españolas. Es la conclusión de un informe del Observatorio de la Diversidad en ... los Medios Audiovisuales (ODA), que ha analizado la imagen que se proyectó de las personas obesas en los medios audiovisuales el año pasado. Más de la mitad de la población española (el 61,4% de los hombres y el 46,1% de las mujeres) se sitúa por encima de su peso ideal, según la Encuesta Europea de la Salud. Un porcentaje que no se corresponde con el escaso 3,3% de personajes percibidos como gordos en todo un año de ficción cinematográfica y televisiva.
Salvo en la terrorífica 'Cerdita', la particular 'Matanza de Texas' a la extremeña de Carlota Pereda, en la que la protagonista encarnada por Laura Galán era objeto de violencia gordófoba, cuesta encontrar obesos, ni siquiera en personajes secundarios. Los niños gorditos suelen aparecer en historias grupales, casi siempre como contrapuntos cómicos, como el inolvidable Piraña en 'Verano azul'. Es el caso de 'El universo de Oliver', 'Llenos de gracia' y 'Voy a pasármelo bien'.
Desde el ODA se reclama un audiovisual más diverso, en el que tengan cabida todo tipo de corporalidades para que sirvan de referentes. No solo se trata de que los chavales no se sientan mal si no poseen un físico como el de los actores y actrices de 'Élite', sino que los guionistas vayan más allá del estereotipo y, por ejemplo, no fomenten imaginarios colectivos nocivos que asocien la discapacidad o la disidencia física con la crueldad, la marginalidad y lo villanesco en historias de fantasía y terror. El informe desciende al detalle con sangrante precisión. Así, solo han encontrado un personaje LGBTIQA+ en una serie, que además sea gordo. Muere al principio de la temporada.
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