Lucía, a Manuel: «Tú no me has amado nunca»
El debate de 'La isla de las tentaciones' reunió de nuevo a la primera pareja que abandonó por separado el 'reality' y provocó que se dijeran de todo
La hoguera de confrontación de Manuel y Lucía centró gran parte del debate de esta semana. Y no era para menos porque los jóvenes protagonizaron uno de los momentos estelares del concurso. Las lágrimas sobreactuadas de él contrataron con la frialdad de ella, que tenía claro que ya no quería saber nada del muchacho. «Basta de humillaciones», zanjó la gaditana cuando su ex quiso despedirla con un abrazo. Poco duró el disgusto porque Fiama apareció junto al fuego y calentó de nuevo el asunto consolando a su nuevo amor, ese que ha surgido en la isla y parece que puede continuar fuera de ella.
El dúo volvió a encontrarse en el plató y se ve que las heridas aún no han cicatrizado. «Mi paso por el concurso me ha servido para confiar más en mí y para darme cuenta de que no todos los hombres son iguales», descubrió la gaditana en conexión en directo. Al otro lado de la pantalla se encontraba Manuel, que recibió 'zascas' de prácticamente todos los colaboradores. «En todo momento me he guiado por el corazón», se defendía el andaluz.
«El peor momento para mí fue cuando escuché a Manuel decir que no estaba enamorado», recordaba la participante que aclaraba que ahora, con el tiempo, «me siento mejor que nunca». La frialdad de la muchacha en su última hoguera no era fingida, a tenor de sus palabras. «Nunca pensé en perdonar a Manuel», desvelaba muy convencida. Y sostenía su apoyo a la actitud de Marina en el 'reality': «La aplaudo porque desde el primer momento se vio que había una atracción por Isaac. Lo de Manuel no son sentimientos», opinó. Y sobre el abrazo que negó a su novio cuando quiso despedirse afirmó: «Cuando me iba, escuché pasos por detrás y pensé que no podía estar viniendo. Pero sí, vino. Y no se lo di porque ya había decidido mirar por mí y no por él». El joven tampoco parece que se arrepienta de su actuación en el concurso. «En cierto modo, hemos mejorado los dos y ahora somos más felices», reflexionó provocando ciertas risas entre los tertulianos.
A Manuel le costaba aceptar los reproches de Lucía, aunque hizo algo de autocrítica al afirmar: «Si mi hermana tuviera un novio como yo, mejor que lo dejara». Eso sí, el joven seguía insistiendo en que amó mucho a Lucía y ésta le respondió con sorna: «Quererme me has podido querer, pero amarme no me has amado nunca». Entre medio, Sandra Barneda anunció que uno de los colaboradores, Tom Brusse, es el cuarto concursante de la edición de este año de 'Supervivientes', sumándose así a los ya anunciados Antonio Canales, Sylvia Pantoja y Alexia Rivas.
En la otra esquina del cuadrilátero están Marina y Jesús. La muchacha se olvidó pronto de su prometido, pero le escuece verlo consolándose a solas en la cama. Parece que no le importaba demasiado verlo coqueteando con Stefany, pero de ahí a que pase de cámaras y se alivie sin ningún pudor… Eso molestó a la sevillana que primero se cubrió la cara con vergüenza ajena y luego pasó al ataque. «Si no lo hace con ella igual es porque cree que no va a estar a la altura de la situación», advirtió. «Tiene miedo a… venirse abajo», ironizó. Ella desde luego no teme nada y lo demuestra cada vez que se encuentra con Isaac, soltero que se verá las caras con Jesús en la siguiente hoguera. «Alegrad esas caras que ya está aquí papá», brinda el 'lobo' nada más llegar. Y esa actitud chulesca seguro que provoca más de un conflicto.