Una traición de los capitanes provoca un monumental cabreo en 'El conquistador del Caribe'

Nada está escrito en 'El conquistador del Caribe', ni siquiera la lealtad de los capitanes hacia sus equipos. Vayamos por partes. El grupo verde ha pasado a la historia. Julian Iantzi informó a la Atabey de que, tras la eliminación de Camino, el conjunto se desintegraba y las concursantes que quedan se repartían entre los otros dos equipos. Así, Annie y Aini pasaban a ser Corocotes, y Line y Terete se vestían de colorado. El recibimiento a las recién llegadas fue muy distinto dependiendo del color dominante. Mientras los azules las acogían con abrazos y vítores, los rojos torcían el gesto. «Line tiene que ir la primera a la palestra, ¿eh?», avisaba Iker. 

Los dos equipos se enfrentaban a un juego de inmunidad peligrosos: el Tronkoala. Cada grupo debía coger los aros con su color de un poste central y luego llevarlos de uno en uno a su señal. Es uno de esos retos de contacto y hubo tensión hasta el final. El cuerpo a cuerpo fue brutal, siendo los rojos los vencedores de una partida en la que no faltaron choques. «Tranquila, yo también se meter unas hostias de flipar», amenazaba Andrea a Sara.

En cualquier caso, el más perjudicado fue Seleta, cuyo carácter afloró y acabó muy enfadado. El momento más surrealista lo protagonizó Annie. «A uno le he cogido de los testículos porque no me dejaba soltar la mano», aseguraba la colombiana. El damnificado fue Atutxa. El triunfo llevó a los colorados a un catamarán de lujo con comida y bebida para regalar. Verles fue duro para sus rivales, aunque lo peor estaba por llegar.

La asamblea azul estuvo llena de enfrentamientos, sobre todo entre Seleta y los presentadores. El capitán Corocote no aceptaba las críticas y caía en las provocaciones de Iantzi y David Seco. «¡Cállate la boca!», ordenaba el de Berriatua a Seco. Y el ciclista no se cortaba: «Cállate tú, Seleta. Tú no me vas a mandar callar». La tensión se cortaba con un cuchillo. «Vas de listillo y estás subidito», afeó Seleta. Seco puntualizó entonces: «Yo aquí soy juez». «Sí, juez, cuando has sido tú el más tramposo que ha habido», ironizó el líder Corocote. «Hoy te has descentrado y has arrastrado a todo el equipo», censuró Ianzti. No llegó la sangre al río.

Los rojos nominaron a Unai y Annie fue la elegida por los azules. Quedaba el voto de los capitanes y la liaron parda. Bego y Seleta decidieron cambiar a última hora su voto y condenaron a Yas. Los azules, convencidos de que la escogida iba a ser la recién llegada Aini, se quedaron en shock. «No soporto la falsedad, me ha sentado como una patada en el culo», bramó Sara visiblemente enfadada.

Para colmo, el duelo -que consistía en bucear y encontrar bajo el agua un banderín, cogerlo, vincularse a una cuerda y escalar hasta la ikurriña- lo perdió Yas. Unai ganó sin competencia y Annie cogió una importante ventaja, pero a punto estuvo de perderla en la escalada.

Finalmente, Yas quedó la última y fue la expulsada. «En parte está bien haber recibido yo la primera puñalada porque así el resto ya saben a qué atenerse», reflexionó la joven sobre el voto de sus capitanes. «Una traición total, ¿no?», preguntó Julian antes de despedir a la de Erandio. «Sí -aseveró la afectada- y pica».

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