Un decorado que es paisaje, personaje y metáfora
No hay mejor escenario para el Tenorio que un cementerio de verdad, «hermoseado a modo de jardín»
Un decorado inspira estados de ánimo, encierros o paraísos. Como decorados, los cementerios son paisaje, personaje, metáfora. Todo está en la segunda parte del drama ... fantástico-religioso de José Zorrilla 'Don Juan Tenorio', que no agotó Tirso de Molina en 'El Burlador de Sevilla y el convidado de piedra', o 'El estudiante de Salamanca' de Espronceda. Ni tantas secuelas: Goldoni, Pushkin, Byron, Shaw, o el suizo Max Frisch, que atribuye al tipo dotes de torero matador. O Molière, Lenormand, Merimée y Dumas: Mónica Hulleu, profesora en Lille, escribió la monografía 'Tumbas y cementerios en el teatro francés'. Hay tema.
Don Juan cena con Avellaneda y el capitán Centellas. El espectro de don Gonzalo previene a Tenorio de que le queda un día de vida y se condenará si no se arrepiente. Centellas mata a Don Juan. Suena un aldabonazo y el ánima del Comendador apremia. Pero acude doña Inés, que intercede y sube al cielo con Tenorio. La fúnebre ficción respalda que cada 1 de noviembre se repita el rito en teatros o camposantos. En la escena I de la 2ª parte del Tenorio las didascalias detallan: 'Panteón de la familia. Un cementerio hermoseado a modo de jardín. En primer término los sepulcros de Gonzalo de Ulloa, de Inés, y de Luis Mejía en piedra (....). Lápidas. Cipreses, flores'.
Dónde mejor esa estampa que en un cementerio de verdad.
En el drama de Castelao 'Os vellos non deben de namorarse' (1941) la Muerte avisa al viejo Saturio del dislate de un amor a destiempo. De Ramón Otero Pedrayo son 'Traxicomedia da noite dos Santos', o 'A Estadea' (la santa Compaña), con clérigos sacrílegos prestos a robar las joyas a una hidalga difunta; como 'O desengano do Prioiro', el chasco del Prior y su criado en Floravia, capital del Ribeiro, donde la industria del vino local torna en boyante negocio de féretros.
Obras paródicas son la 'Representación del Tenorio por el carro de meretrices ambulantes' (1971) de Luis Riaza. Y 'd.juan@simetrico.es: la burladora de Sevilla y el Tenorio del XXI' (2008) de Jesús Campos García; o el drama de López Mozo: 'D.J.' (1986). De Francisco Nieva es la tetralogía 'Misterio y festival' (1994), sainete surrealista. En 'Día de capuchinos' evoca una cripta de la orden en Palermo (Sicilia) con momias del XIX en ropa seglar sobrepuesta tras la momificación: 'juego del arte, sin acción, sin historia: la vida como fingimiento y disimulo'. De Antonio Gala, decorada por Nieva (2003), es la 'Inés Desabrochada' que dirigió Pedro Olea, con cementerio/decorado.
Y después la muerte, que se trae mucha labia.
Las tumbas poblaban el 'teatro de la Muerte' del polaco Tadeusz Kantor (1915-1990). En 'Wielopole' las cruces rotulan fosas de las dos grandes guerras. En '¡Que revienten los artistas!' (1985) el lugar teatral no es un cementerio minorista sino la modalidad a granel de fosas comunes y cunetas. Y otro tanto el polaco Josep Szajna (1922-2008) en 'Auschwitz-park' el parque crematorio para judíos.
Las tumbas poblaban el 'teatro de la Muerte' del polaco Tadeusz Kantor
Diálogo entre enterradores
El concepto 'site-specific art' denota creaciones para un lugar específico donde toman sentido cabal paredes, paisajes, día y hora. Dramaturgia expandida, itinerante, con secuelas hispanoamericanas. 'Pequeño gran muerto' (2021) se ve en pleno cementerio La Plata de Buenos Aires. El guion evoca al bohemio uruguayo Matías Behety, que murió tuberculoso en 1885, con 35 años. Teatricicle es otro grupo, mexicano, intercultural. 'El fandango' está cada 1 de noviembre en cementerios locales. Mudos inquilinos 'resucitan' en la fiesta. Clarea, y aguardan otra cita anual.
El camposanto será creencia, símbolo. En el 'Hamlet', acto V escena I: 'Un cementerio. Dos enterradores: El 1º:-¿Y ha de sepultarse en cristiana tierra a quien buscó su propia muerte? El 2°:- Te digo que sí; la justicia ha reconocido el cadáver y dispuso que le den cristiana sepultura'.
Entre tumbas viven Juan y sus amigos marginados en 'Los verdes campos del Edén' de Gala. José María Pou dramatizó el best-seller 'El chico de la tumba de al lado' de Katarina Mazetti. Laura es una joven bibliotecaria cuyo marido murió. En las visitas a su tumba de Orjan congenia con Pablo, un granjero al cuidado de otro nicho.
Y proyectos nómadas: el grupo Xarxa intervino en naves vacías, pistas de esquí olímpico en Albertville, plazas… Su 'Ciutat dormitori', para el Lliure, es una visita guiada, un paseo crítico sobre la muerte y su gestión (incluso económica). Como 'Remote Madrid', en el Cementerio Británico de Carabanchel,
Rondas por los que Michel Foucault llama los 'espacios-otros'. Esas 'otras ciudades': los cementerios.
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