Borrar
Telmo Irureta presentó en los Golem Alhóndiga 'La consagración de la primavera' en la gira de la Academia de Cine 'El gran viaje de la gran pantalla'. Luis Ángel Gómez
Telmo Irureta: «Prefiero enamorarme que andar»

Telmo Irureta: «Prefiero enamorarme que andar»

Su Goya por 'La consagración de la primavera' provocó un debate social sobre la sexualidad de las personas con discapacidad, aunque todavía no se ha traducido en ofertas de trabajo

Jueves, 22 de junio 2023, 20:56

«Nosotros también existimos y follamos», proclamó Telmo Irureta (Zumaia, 1989) cuando alzó el Goya al mejor actor revelación por su papel en 'La consagración de la primavera', una persona con discapacidad que recurría a un asistente sexual. Después volvió a armarla cuando defendió el derecho a la sexualidad de las personas con discapacidad y confesó que recurría a la prostitución masculina. La encefalitis que sufrió con dos años y medio no le ha impedido cumplir sueños a este hijo de ertzaina y empresaria, que ayer se acercó a Bilbao dentro de la gira 'El gran viaje de la gran pantalla' organizada por la Academia de Cine.

–¿Cuántas veces le saca brillo al Goya a lo largo del día?

–No le saco brillo, pero sigue brillando. Lo tengo en la sala. Pensé en ponerlo en el dormitorio para que me acompañara en mis sueños, pero se ha quedado allí.

–¿El Goya le ha cambiado la vida?

–Sí. La gente se acerca en la calle y me pide una foto, algunos con apuro incluso. Y luego me piden perdón. No me molesta, me hace ilusión.

–¿Se ha traducido en ofertas?

–Todavía no.

–La armó buena al reconocer que recurría a la prostitución.

–Se hicieron una idea equivocada de mí. No se han puesto en mi lugar, en la piel de las personas con discapacidad, con la vida no tan fácil. Se dijo que el sexo no es un derecho, y no es así. El sexo es salud, calidad de vida, no se lo puedes quitar a una persona. Yo en ningún momento he hablado de explotación sexual.

Tráiler de 'La consagración de la primavera'.

–Le tacharon de «lascivo» y «violador».

–Sí, de explotador de mujeres. Pero si soy gay... Hablaba de una decisión libre entre dos adultos. Nadie se puede meter ahí, si yo quiero y él también...

–¿No ve ahí explotación?

–Veo generosidad. Una chica que era trabajadora sexual me paró en la calle para darme las gracias por darles visibilidad. Ese discurso de ayudar a las mujeres... Igual esas mujeres no quieren que las ayudes.

–'La consagración de la primavera' ha cumplido su objetivo, provocando un debate y mostrando cuerpos que no estamos acostumbrados a ver en el cine.

–Si de niño hubiese visto cuerpos como el mío en una pantalla me hubiera valido para aceptarme más y no tener tantos miedos y complejos. A las personas sin discapacidad también les puede ayudar a ser más respetuosos y tener más empatía. No somos tan distintos.

–Usted es consciente del efecto que provoca en la gente y me da que juega con ello un poquito.

–Claro que sí. Soy muy provocador, sobre todo si tengo un mensaje claro que me parece importante. Meto humor, ironía, para que el mensaje llegue. Hasta en las situaciones más duras un chiste hace magia. Es luz en un momento oscuro, impacta y te hace pensar. Porque no hay que ir de víctima.

Valèria Sorolla, Telmo Irureta y Emma Suárez en 'La consagración de la primavera'.

–¿Cuál es el prejuicio más sorprendente que se ha encontrado ante una persona con discapacidad?

–Lo que la gente no sabe se lo inventa. '¿Pero tú puedes tener sexo? ¿Pero a ti se te levanta la polla?'. Piensan que no sientes de cintura para abajo al estar en silla de ruedas. Ni ligas, ni follas, ni nada. Eres un ángel, un niño grande. Y se equivocan.

–Se matriculó en Psicología.

–Empecé y lo dejé. No voy a clase porque me dije, ¿qué hago yo aquí? Estoy viviendo un momento muy bonito como actor y prefiero aprovecharlo a tope en vez de estar dando Neurociencia en la uni.

–¿Cuál es su papel soñado?

–Me gustaría hacer de malo, que parezca majo al principio y al final sea un hijoputa. Y una historia de amor. Estamos acostumbrados a ver al típico guaperas musculoso. Y no, tiene que ser algo que incomode al público.

Telmo Irureta con el Goya al mejor actor novel el pasado mes de febrero. Europa Press

–Ya no vive en Zumaia.

–Me he ido a Donosti. Vivo solo entre comillas, porque soy muy dependiente por mi poca movilidad y tengo dos asistentes personales que me ayudan en el día a día. Estoy muy bien acompañado.

–Nunca se ha enamorado.

–No. Me gustaría compartir mi vida con alguien que me dé cariñitos, porque soy muy mimoso y romántico. ¿Qué es estar enamorado? ¿Sentir las mariposas en el estómago? Queda un poco cursi, pero soy un enamorado del amor. Tengo la idea de lo que es, algo que no me ha llegado y que sé que me lo merezco. Si no viene, tampoco estoy tan mal.

–¿Si le dan a alegir entre enamorarse y andar?

–¿Enamorarme en un amor correspondido o a sufrir?

–Correspondido.

–Pues amor siempre. ¿Para qué quiero caminar, si tengo una silla de ruedas maravillosa?

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Telmo Irureta: «Prefiero enamorarme que andar»