El teatro lleva la memoria histórica de Bilbao a Colombia
Bea Insa participa en el festival Mujeres en Escena por la Paz con la obra 'Contado por ellas', que recoge vivencias de la Guerra Civil y el franquismo
'Contado por ellas', el trabajo más personal de la actriz, autora y directora teatral Bea Insa, llevará los testimonios reales de mujeres que vivieron ... la Guerra Civil y el franquismo de Bilbao a Colombia. La obra participa el día 12 en el Festival Mujeres en Escena por la Paz de Bogotá, que cumple treinta años, y ofrecerá otras dos representaciones, en el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación de la ciudad y en la Corporación Cultural Nuestra Gente de Medellín. «Es una oportunidad fantástica para interactuar con ellos en un lugar donde la memoria histórica está muy viva», asegura.
El Teatro de La Candelaria, que lleva más de medio siglo en el barrio del mismo nombre de Bogotá, «es una cuna del teatro experimental en Colombia», destaca Insa. Su lema es «insistir, persistir, existir». La actriz y dramaturga Patricia Ariza impulsó el festival Mujeres por la Paz para dar visibilidad a un trabajo «escondido por siglos». En la primera edición solo contaron con seis obras e incluso les hicieron caricaturas, este año participan 80 grupos con funciones presenciales y virtuales.
«En Latinoamérica el compromiso con el teatro es muy fuerte, casi no se lo plantean como entretenimiento»
Bea Insa, que también dará un curso de presencia escénica, viaja hoy junto al dramaturgo Ángel Mirou, con el que forma La Pacheca Collective. Han recabado el apoyo de la Embajada de España y el Instituto Etxepare y estarán en Colombia hasta el día 22. 'Contado por ellas' suma así más de 8.000 kilómetros a un viaje que empezó con la historia de su bisabuela, «que tuvo que dejar solas a sus tres hijas porque la metieron dos años en una cárcel a seiscientos kilómetros de su casa». Esta historia, de la que se hablaba poco en su casa, la llevó a investigar y a recoger otros testimonios de mujeres que sufrieron la guerra y la represión del franquismo. Así surgieron los personajes en los que ella se va transformando en escena. «Con las mujeres que he entrevistado se ha creado una relación especial, de confianza, y en cada función me acuerdo de ellas», dice.
Estrenó la obra poco antes del confinamiento y además de recorrer Bizkaia la ha llevado a Sevilla, donde fue finalista en el festival Cenit, Logroño y Barcelona. En septiembre le espera Madrid. «Es un trabajo íntimo y estoy muy enganchada a esta obra, la voy revisando», afirma. «El 14 de agosto se cumplen 85 años de la masacre en la plaza de toros de Badajoz y me gustaría hacer referencia a ello». Su paso por Colombia le dejará poso. «En Latinoamérica el compromiso con el teatro es muy fuerte, casi no se plantean hacer algo de entretenimiento y superficial. Tiene el objetivo de reflejar problemas y transformar la sociedad».
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