El sonido de la Generación del 27 con una réplica de la guitarra de García Lorca

A la estrella estadounidense el entusiasmo le duró poco y se olvidó del asunto. Le dejó al luthier con las maderas ya elegidas y con el diseño de la tapa y la roseta ya hecha. En octubre del año pasado, el guitarrista gallego Samuel Diz (Tui, Pontevedra, 1985), después de pedir permiso a los herederos de Lorca para construir la réplica, habló con Díaz para que por fin terminara el trabajo. Es la guitarra que ahora utiliza en sus conciertos.

Su sonido se podrá escuchar hoy en Bidebarrieta Kulturgunea. Samuel Diz interpretará con ella los temas de su disco 'Memoria de la melancolía', que une la biografía de María Teresa León con las composiciones originales de músicos de la Generación del 27. El álbum se grabó en la Huerta de San Vicente con la guitarra original de Lorca, la que el escritor tocó desde que se la regalara su tía Isabel cuando tenía 8 años.

En el acto de Bidebarrieta, Idurre Eskisabel leerá textos en castellano y en euskera, y el tenor argentino Jonatan Alvarado, que colaboró en el álbum, aportará su voz en los temas con parte vocal.

«Empecé a profundizar en el legado musical de la Generación del 27 desde que estrené una obra de Jesús Bal, el único compositor de la Residencia de Estudiantes de Madrid en la época en que estaban Dalí, Buñuel y Lorca», comenta Diz. «Fue un momento de esplendor para la guitarra, símbolo cubista, en el que se recuperan composiciones para el gran instrumento del Siglo de Oro, la vihuela. Desde entonces me he dedicado prácticamente en exclusiva a rescatar papeles de esa época».

Lorca quería dedicarse a la música, aunque como tantos otros artistas de familias con posibles tuvo que matricularse en Derecho. A los 18 años publicó su primer libro, 'Impresiones y paisajes', en el que cada descripción es palabra y melodía. En él se inspiró el guitarrista gallego para publicar un disco con el mismo título en 2015, con obras de Manuel de Manuel de Falla y de Regino Sáenz de la Maza, defensores como el poeta de la hibridación de lo popular y de lo culto.

Christopher Maurer, hispanista de la Universidad de Boston y experto en la obra de Lorca, le invitó a dar un concierto y le puso en contacto con la familia del escritor para que pudiera acceder a la guitarra original. «Está viva. Suena como sabe un vino reserva. El sonido de los graves, sobre todo de la sexta cuerda, es telúrico».

En el disco que presentará en Bidebarrieta hoy recoge un 'Capricho basko' de la compositora navarra Emiliana de Zubeldia, una pieza inspirada por las investigaciones de Aita Donostia de esta mujer que se exilió primero en Argentina y luego en Sonora, México.