Jennifer López durante su actuación en Fuengirola. Agencias

El mal trago de Jennifer López en Fuengirola a pocos días de pisar el BEC: abucheos y quejas por los accesos y el sonido

Los asistentes manifestaron su enfado con gritos de «no se oye» y «fuera, fuera» durante la actuación de la estrella internacional

Lunes, 14 de julio 2025, 17:17

A pocos días de que Jennifer López ponga a bailar al BEC, la estrella internacional ha sido foco de las críticas por la organización de su concierto del pasado viernes en Fuengirola. El problema en los accesos y el sonido hizo que los asistentes mostraran su indignación hasta el punto de silbarla y gritar «fuera, fuera» y «no se oye». Algo que empañó sobremanera su actuación «divina».

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Los ánimos llegaban caldeados por el cambio ubicación por sorpresa y a menos de tres semanas de la fecha. La organización adujo «problemas logísticos» para realizar el cambio: del Estadio Atletismo Ciudad de Málaga al Marenostrum de Fuengirola. De esta manera, los asistentes podían mantener su entrada o solicitar la devolución en un margen de tres días. El problema es que muchos ya habían cogido alojamiento, por lo que se vieron obligados a dormir a 30 kilómetros del recinto donde finalmente se celebró esta parada de la gira 'Up All Night. Live in 2025'.

Las fuertes rachas de viento obligaron a 'JLo' a retrasar una hora el inicio del show. El programa Mañaneros de TVE ha recogido el testimonio de Javier, uno de los afectados. Asegura que entrar fue muy complicado, lo que hizo que la artista arrancase su concierto con miles de personas en la calle. «Solo había dos puertas de acceso para 15.000 personas. Además, no estaban señalizadas las distintas colas que la organización había dispuesto».

También critica que las zonas diferenciadas para acceder al recinto no estaban bien señalizadas. «Indicaba puerta de acceso, pero mi ticket era por otro lugar. Tenías que ir hasta el otro extremo del castillo y esperar otras dos o tres horas, por el volumen de gente que había para poder entrar», ahondaba este asistente. Ya una vez dentro junto a su pareja, ambos se llevaron un chasco. «La zona que supuestamente habíamos pagado ya estaba llena de gente, porque no había zonas delimitadas ni señalizadas».

Muchos fans denunciaron en sus redes los problemas de sonido. «¡No se escucha!», se quejaban algunos a gritos. También hubo silbidos y cánticos de «fuera, fuera». «Vaya el sonido en el concierto de Jennifer López, de verdad. No sé cómo en el siglo 21 hay está basura de sonido», se quejaba el usuario @viferlin9 en 'X'. Otra cuenta, la de @SeleneDiosaLuna, lamentaba «gastarse 300 euros en dos entradas para ver a Jennifer López y que no se escuche el sonido».

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El inconveniente, según Javier en Mañaneros, podría haber sido causado por el aire. «Había mucho viento de poniente, lo que probablemente hizo que el sonido se desplazara hacia la parte de Levante, que fue donde nosotros conseguimos encontrar un hueco». Ahora, espera la respuesta de la organización a su solicitud de devolución de entradas.

Los precios de las entradas eran muy variados. Así, en la zona más cercana al escenario había hasta tres tipos de localidades: Front Stage, a 222 euros por persona (incluye gastos de gestión); Golden (incluye un regalo), 277,30 euros; y Golden Early, que permitía entrar antes que el resto para tomar posiciones, 416,25 euros. Después se ha creado una zona intermedia denominada General Pista, a 144,30 euros, mientras que el último tramo previo a la grada se vendía a 99,90 euros. Los asientos ya estaban todos vendidos antes del cambio de ubicación.

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Según recoge El Español, algunos asistentes vivieron el evento como un «caos». «Era horrible, no la escuchábamos cantar». Y las ubicaciones según la zona también fallaron: «Había personas que pagaron 1.000 euros por la entrada junto a personas que pagaron 90 euros». «La organización del evento no ha estado a la altura», criticaba en sus historias de Instagram la influencer malagueña Esperanza Aragón. Acudió al concierto con su familia y, según denuncia, los reubicaron «de muy mala manera». Asegura que JLo estuvo «divina», pero falló la organización. «Había gente con muchísima ilusión por venir a este concierto y muchas personas mayores que no sabían dónde ubicarse», lamenta.

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