«El problema es la vida, quiero vivir rodando»

-No para, ¿cómo hace para enganchar un rodaje con otro?

Lo puedo hacer porque tengo una productora, un equipo que puede trabajar entre película y película, paralelamente, algo que no había tenido nunca. Hay un momento flipante que alguna vez ha contado Spielberg que resume esto. Estaba rodando 'Hook' en la cubierta del barco gigantesco y a la vez le estaban enseñando los dinosaurios de 'Parque Jurásico'. Rodeado de piratas de figuración. Lo que he conseguido es eso, eliminar los tiempos muertos entre producción y producción. Mientras estamos con la postproducción de una película, estamos preparando otra. El problema es la vida. Quiero vivir rodando y por primera vez, lejos de ser angustioso, es maravilloso.

-Es como Woody Allen en versión acelerada.

Sí, puede ser, muy frenético.

-Estrena en Sitges, el sitio ideal para su cine.

No sé por qué no vivo aquí. No lo entiendo. Siempre que vengo me pregunto porqué no tengo una casita. La sensación para todas aquellas personas que nos gusta el fantástico es que esta es nuestra casa. Aquí estás con gente que es como tú. Todos entendemos el cine de la misma manera. Nos gusta más o menos lo mismo. No tengo que explicar nada. Es una sensación de pertenecer a una familia.

-Hay un idioma común.

Eso es. Estoy ya mayor mayor para discutir y estoy con un grupo de gente que me entiende. Insisto, somos familia. Cuando alguien aquí te recomienda una película que le ha gustado es porque quiere compartir algo contigo. El objetivo es disfrutar y pasarlo bien, no decir categóricamente: «esta peli es muy buena». Y ya está. Va más allá. Es lo que busco...

-Precisamente 'Veneciafrenia' es cine sin complejos. Han hecho lo que les apetecía.

Claro, y aquí tengo la sensación de que voy a enseñarla a mis primos, a mi hermano, a gente a la que no tengo que dar explicaciones.

-No es un terror duro, ¿quizás por estar detrás una popular plataforma de ocio en streaming?

No, para nada, de hecho la siguiente película del sello es de Jaume Balagueró, 'Venus', y esa va muy en serio. Va a dar mal rollo. Cine puro y duro de terror. Está basada en el cuento de Lovecraft 'Los sueños de la casa de la bruja'.

-Ya los títulos de crédito que presentan la historia dejan claro por dónde va.

Están las claves de la peli. Es muy bonito y me gusta mucho la idea de los títulos de crédito como pequeño resumen de lo que vas a ver. Los turistas como amenaza. Como monstruos. Los turistas son los monstruos…

-La especie humana.

Yo mismo soy un maldito turista. Cuando vamos a Venecia todos decimos, «qué horror que se hunde la ciudad», pero luego pienso… ¡si soy yo! Y yo valgo por dos porque soy grande. Somos la peste, las ratas…

-Una plaga.

Sí, es esa sensación de invasión, muy acorde al género, como los zombies… A mi no me gusta el fantástico por simple fascinación, coleccionismo o paranoia. La mejores películas son cine fantástico. ¿Cuáles son las mejores películas del año pasado?

-Ahí está 'Titane', que ha ganado en Cannes, se ha estrenado este fin de semana.

Es fantástico puro. Y si hablamos de arte y ensayo te cito a Panos Cosmatos y 'Mandy'. Y me gusta mucho el cine de Marvel, no juego a decir que «eso no es cine».

-No va a dar un titular como Scorsese y compañía.

Todo lo contrario.

-Volviendo la película, los protagonistas son bastante odiosos, como espectador quieres que les pasen cosas.

Como en 'La matanza de Texas'. Hay una escena que es muy parecida, además. Cuando entra el bufón en la barcaza taxi donde van los protagonistas. 'Amenaza en la sombra' también está por ahí, es una de mis películas favoritas.

-¿Por qué Venecia?

Quería hacer un thriller. De hecho, la película va más por ahí. Hay suspense, ha desaparecido alguien al principio y se titula 'Veneciafrenia' por 'Frenético' de Roman Polanski. El proyecto surgió cuando estaba de viaje en Venecia y me di cuenta de que era parte de problema de que la ciudad estuviera hundiéndose, como hemos hablado antes. ¿Qué ocurriría si alguien se harta de los turistas?

-Rodaron en plena pandemia.

Por eso es uno de los rodajes más complicados en los que he estado. Había pocas horas de luz, no podíamos perder un segundo y el equipo viajaba de un lado a otro en una barca. A veces no llegaba porque iba poco a poco en un bote. Al segundo día nos llevábamos a cuestas el trípode y la cámara para ahorrar tiempo. Además no había nadie en la ciudad por el confinamiento y todos teníamos que hacernos continuos tests de pcr. Todo iba en contra.

-Hay una fiesta con música atronadora.

Es algo que me obsesiona. Llevé un equipo de sonido brutal para que la música se escuchase a todo trapo y todo el mundo bailara a tope. No es habitual. Se suelen rodar sin música estas escenas y por eso no suelen funcionar, porque la figuración no va al mismo ritmo. Por eso creo que ha quedado particularmente simpática de ver.

-Está en un buen momento en su trayectoria. Aparte de no parar de rodar, acaba de inaugurarse una exposición sobre su obra en la Filmoteca Española y se reestrena en cines 'El día de la bestia' en 4K.

Flipo con que una película mía se estrene otra vez en cines tantos años después. Estoy orgulloso. La exposición me ha inquietado más. He visto todo ahí junto y me he dado cuenta de que cuento siempre lo mismo.

-Se le llama visión autoral.

Yo lo llamo enfermedad. Siempre estoy agobiado con las mismas cosas y lo que para otros es estilo para mi son problemas que resolver.

-Chicho Ibáñez Serrador también está presente en espíritu en 'Veneciafrenia'.

No solo su figura como cineasta es importante, lo es también su manera de vivir. Chicho genera un universo a su alrededor. La manera de hacer televisión o de contar las historias para no dormir. Es un personaje que lidera una manera de ver el mundo o el cine. De ahí nace también The Fear Collection, de mi deseo de ayudar a otros a contar historias de terror. Quiero animar a la gente a ver más este género, porque ahora es con el que más disfruto.

-Ha abrazado sin problemas la proyección en streaming.

No te puedes poner en contra de lo que sucede. Tienes que adaptarlo a tus objetivos e intenciones. Es perfectamente compatible la exhibición en salas con las plataformas. Hay que encontrar un equilibrio. Por ejemplo, 'Dune' te hace salir de casa, te apetece verla en pantalla grande. Si conviertes el cine en algo único, puede volver a tener el atractivo que tenía antes.

-Ha rodado con gente joven y algún rostro nuevo.

Una gozada, son muy buenos y estás en sus manos cuando haces una peli. En este caso he estado muy bien acogido.

-Otro tema presente en la película es cómo muchas veces vemos la vida a través del móvil.

Es esencial en la historia, el móvil es otra máscara. A veces nadie ve algo horrible que está pasando porque está mirando el móvil. Interpretamos la realidad a través del móvil y puede ser otra cosa. A veces colocamos ese filtro para no asustarnos con cosas que vemos bastante terribles. Así son más soportables.

-¿Qué cree que pensarán los venecianos cuando vean la película?

Ni idea. Habrá muchos que verán la película desde el punto de vista del personaje aristócrata, por ejemplo. Y habrá otros que la verán desde otra.

-Para la banda sonora ha vuelto a contar con Roque Baños, al que Sitges otorga en esta edición un premio honorífico.

Le dije que quería que pareciese una ópera antigua. Tiene un punto 'El fantasma del paraíso'. Está genial…

-¿Cree que ha cambiado el consumo audiovisual con la pandemia?

Obviamente, sin duda. Los que ya estaban en ello, se afianzan, y los que no lo conocían, entran en el juego. El confinamiento nos ha llevado a plantearnos el mundo desde nuestra casa. Tiene sus ventajas y sus desventajas.