El drama de Mónica Cervera: de casi ganar un Goya con Álex de la Iglesia, a vivir en la indigencia

Mónica Cervera (Marbella, 1975) estuvo a punto de lograr un Goya hace veinte años cuando fue nominada a mejor actriz revelación por su papel de Lourdes en la película 'Crimen ferpecto', dirigida por el bilbaíno Álex de la Iglesia. De aquello solo quedan los recuerdos, y ya ni siquiera en la mente de la actriz. La malagueña no quiere saber nada del mundillo. «No quiero que me nombren la palabra televisión ni cine. Estuve ahí en su día, pero no quiero volver nunca. Estoy bien como estoy, no quiero hablar de ese pasado», afirma en una entrevista a la revista 'Semana' mientras vive en la indigencia, en un parque de Marbella.

Cervera pasa las horas en un banco de su localidad natal y de vez en cuando publica fotos en sus redes sociales donde se le ve muy desmejorada. Es su día a día y aunque se le ha ofrecido ayuda, ella lo rechaza. Dice que no necesita «nada de nadie». Ni de su familia ni de su hijo de 14 años. «Me tienen que respetar. Quiero que me dejen en paz y vivir como yo he elegido vivir».

Ahora, sin techo bajo el que cobijarse, la malagueña solo busca ayuda en ciertos organismos, aunque de momento no ha recibido respuesta. «Lo único que quiero ahora es que Bienestar Social, con los que tengo cita el 25 de enero, me den una estabilidad», confiesa Cervera.

Tras su mayor éxito con 'Crimen ferpecto', después llegaron otras grandes apariciones en '20 centímetros' y 'Busco'. También tuvo trabajo en series como 'Con dos tacones' o 'Manos a la obra'. Uno de sus últimos papeles fue en 'La que se avecina'. Allí interpretó el papel de María José Rivas Latorre, hermana de Amador. Fue una cosa puntual y breve. Apareció en tres episodios, el último en 2016.

Desde entonces a Cervera se le perdió la pista. Aunque en sus redes sociales ha ido ofreciendo pinceladas de lo que actualmente es su vida, es ahora cuando se decide a hablar.