Crítica de 'Pearl' (2018): Cuerpo y alma
Críticas de cine ·
Se estrena con mucho retraso una película tan particular como 'Pearl', centrada en los avatares que rodean la vida de la culturista Léa Pearl (encarnada por la actriz suiza Julia Föry), a la que vemos dispuesta a competir con otras aspirantes para obtener el título de 'Miss Heaven'. Certamen para el que ha estado preparándose durante cuatro años, con la ayuda de su abnegado entrenador, empeñado en que su pupila logre el codiciado trofeo. Paige Hathaway, Bradley Martyn, Paloma Ramos, Pilar Treviño, Verónica López, Susana Alonso o la baracaldesa Eva Berenguer, doble campeona del mundo, son algunas de las más prestigiosas culturistas de élite a escala global.
La cinta de la cineasta francesa Elsa Amiel intenta dotar de robustez visual a los esfuerzos de esta atleta a la hora de hacer realidad su sueño. De ahí que músculos, talento, sudor, lágrimas y espíritu de sacrificio se dan cita de forma armónica con la idea de honrar a dicha 'perla', sin glorificar el culto al cuerpo, pero tampoco sin menospreciarlo. Tened en cuenta que no hay esfuerzos inútiles, demostrado incluso por Sísifo, personaje de la mitología griega, fundador del reino de Corinto, que cultivaba sus músculos. Asimismo, 'Pearl' sugiere que siempre es bueno convertir el propio cuerpo, oculto entre la fronda y las lomas del físico, en una fortaleza inexpugnable.
Pearl
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Francia. 2018. 76 m. (16). Drama.
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Directora: Elsa Amiel.
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Intérpretes: Julia Fory, Peter Mullan, Mathieu Amalric.