Jungwirth, el eslabón perdido entre abstracción y figuración
No hay certezas ni definiciones exactas para el espectador que recorre la admirable retrospectiva consagrada a Martha Jungwirth. Sus obras difuminan la frontera entre la ... representación y la abstracción, pero su pincelada suelta y apresurada es más intuitiva y espontánea que la de los expresionistas norteamericanos y bastante menos teatral y existencialista que la de los informalistas europeos. Encima, los soportes son inusuales -papel, cartón, etc…-, las temáticas muy diversas, las inspiraciones son múltiples y tienen una percepción precisa sobre el mundo que rodea a la artista; los colores y los materiales crean interacciones mediante un enfoque que está a medias del azar y la intención; y las explosiones de expresión pura se enlazan sugerentemente con una desintegración gestual de las formas figurativas.
Decididamente estamos ante un eslabón perdido entre abstracción y figuración, ante una solista o una 'rara avis' que hace una pintura tan singular y gestual como refinada o ante una rebelde que sigue su propio camino, una senda en la que se certifica que el concepto y la idea nunca lograron la muerte de la pintura-pintura. Cierto que en las cuatro salas del recorrido o en las cerca de setenta obras de la muestra que reflejan cinco décadas de trabajo hay variaciones, desafíos y adaptaciones en función de las temáticas y las inspiraciones, de las cargas emocionales o de las formas erráticas con las que experimenta la materialidad y la imagen de la pintura. Pues sí, pero de tanta variación, de las imágenes internas de sus retratos o autorretratos, de sus miradas al mundo natural o de su visión de la historia del arte, también surge un hilo conductor o una sublime coherencia que se asienta a lo largo de un inteligente montaje, temático, desahogado y repleto de guiños visuales, en una creación directa y física sobre cada obra, en un espacio intuitivo que las define, en un viaje entre el gesto, la línea, la forma y el color; y en la sutil transmisión que de su percepción subjetiva nos muestra una formidable artista.
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