Tapachula, tu cantina mexicana de confianza

Platos mexicanos elaborados con productos de calidad en el corazón de Indautxu

El auténtico rincón mexicano lo encontramos en Bilbao, justo detrás de la Alhóndiga y a unos pasos de la salida del metro de Indautxu. Tapachula abrió sus puertas en 1996 y ya con una trayectoria de casi tres décadas de andadura los mejores platos mexicanos los podemos degustar en la capital vizcaína.

Nachos, guacamole con maiz, chiles en nogada, toritos bravos, costillas michoacanas... seguro que a más de uno se le está haciendo la boca agua. Hay que acercarse hasta Tapachula y degustar sus platos, tanto picantes como no picantes. Los comensales se van a llevar «una bonita experiencia a todos los niveles, ya que primero te vas a sentir como en casa y luego vas a disfrutar de la calidez que ofrece el local», sostienen.

Sus responsables quieren dejar claro que no son ni tex mex ni fast food. A base de mucho esfuerzo han sabido mantener la esencia de lo que quieren transmitir sin cambiar la estructura del negocio. Para ello, «nos importa mucho la calidad de los productos que utilizamos y el equipo humano que está detrás» pone la guinda a Tapachula.

Trato cercano

El trato con el cliente es de tú a tú. Reconocen que «hay que adaptarse a los tiempos que corren pero seguimos apostando por el papel y el bolígrafo para tomar nota, ya que tiene un cierto encanto que la tecnología no nos lo podría dar jamás». La cercanía es total con todo el que cruza el umbral de Tapachula. «Nos acercamos a preguntar si todo ha estado del agrado de quienes nos visitan», añaden.

La clientela de Tapachula es de lo más variada. Familias, amigos, parejas… el público es heterogéneo y se enorgullecen de que «nos sentimos queridos y valorados en nuestro entorno». Tanto es así, que muchas parejas que iban a cenar a este mexicano siguieron acudiendo después de casarse, solos o en compañía de sus hijos, quienes ya de adolescentes se han mantenido fieles a unos sabores de los que disfrutan acompañados de sus amigos o parejas.

Las prisas no son buenas consejeras. Y en ocasiones ni hasta para sentarse a la mesa tenemos tiempo y andamos con prisas. En Tapachula el reloj se vuelve más lento con el objetivo de conseguir una experiencia gastronómica gratificante y extraordinaria. El ambiente que se respira es de buen rollo y mientras saboreas los suculentos platos de fondo escuchas las rancheras, sintiéndote en las entrañas del mismo México sin salir de Bilbao. ¡Que no te lo cuenten! Tu cantina mexicana de confianza está en la capital vizcaína. ¡No te lo pienses más y reserva por teléfono tu mesa!