Borrar
MaldeOjo Optika Atelier

Anchoa: cuando el arte se pone gafas

Imanol y Guido presentan su simbiosis de arte y artesano

EL CORREO

Compartir

En Bilbao pasan cosas que no pasan en ningún otro lugar del mundo. Y ésta es una de ellas: una gafa que es, a la vez, objeto de diseño, pieza artística y homenaje en clave local. Una gafa que tiene forma de anchoa. O mejor dicho, que es una anchoa. Una gafa hecha a mano, con los materiales de siempre y pensada para durar. Una gafa kilómetro cero, nacida, creada y vendida exclusivamente en Bilbao.

La idea surge de la colaboración entre la óptica MaldeOjo —un espacio que apuesta por el diseño artesanal, el slow retail y la producción local— y el artista multidisciplinar Guido Di Marzio. Italiano afincado en Bilbao, Guido es un creador inquieto: ha trabajado en películas, ha diseñado restaurantes, ha esculpido, pintado, soñado. Y ahora también ha hecho gafas. O mejor dicho: La gafa.

Esta pieza, que presentan hoy 5 de junio a las 20.00h en su óptica, es el resultado de una simbiosis real entre arte y óptica, entre escultura y funcionalidad, entre la creatividad de Guido y la experiencia en el diseño y fabricación de monturas de MaldeOjo.

La gafa tiene una varilla que no se parece a ninguna otra: la parte delantera está hecha con resina epoxi, moldeada cuidadosamente por Guido con forma de cabeza de anchoa. El resto de la varilla ha sido diseñada y fresada por nosotros, con un marcado especial que recuerda a la raspa del pescado. Todo forma un solo cuerpo, una sola historia: la de una anchoa que, en lugar de nadar en el mar, se desliza detrás de la oreja. Una pieza provocadora, divertida, y al mismo tiempo elegante y sofisticada.

Declaración de intenciones

Pero más allá de lo visual, esta gafa representa un manifiesto. En tiempos de producción en masa, de modas efímeras y de gafas sin alma, esta es una apuesta por lo contrario: por lo local, lo artesanal, lo inesperado. Es una gafa que solo se ve en Bilbao, que solo se fabrica en Bilbao y que solo se vende aquí. Y eso no es casualidad, es una declaración de intenciones.

«Cada gafa se ha hecho a mano, como se hacían antes: con tiempo, con mimo, con herramientas reales y materiales nobles. Nada de procesos automatizados o montajes impersonales. Aquí hay oficio. Aquí hay compromiso. Aquí hay responsabilidad: si tú tienes un problema con mi gafa, yo también tengo un problema. Y no nos gustan los problemas. Porque para nosotros cada montura es una promesa: la de ofrecer un producto bien hecho, pensado para durar, fabricado para que funcione, y no para que sea reemplazado al año siguiente».

«En nuestra óptica, el tiempo va más despacio. No creemos en lo rápido. Creemos en diseñar con calma, en escuchar al cliente y en fabricar gafas a medida, adaptadas al rostro de cada persona. Porque si. Aquí tb puedes diseñar tu gafa y te la fabricamos en nuestro taller», afirman los responsables de MaldeOjo.

«Cada montura que sale de nuestro atelier es única, no solo por su estética, sino porque se ajusta al milímetro al que la va a llevar. Fabricamos como antes, con la tecnología de hoy. Y diseñamos para durar, no para pasar de moda. Porque cuando alguien entra en nuestra óptica, no está comprando solo unas gafas: está invirtiendo en una experiencia, en una forma distinta de entender el diseño y el consumo».

Creatividad bilbaína

«Nos gusta pensar que esta creación habla de Bilbao de una forma diferente. No a través de sus clichés, sino desde su creatividad. Bilbao es ciudad de artistas, de diseñadoras, de personas que hacen cosas con las manos. Y también es ciudad con sentido del humor, con carácter, con sabor propio. ¿Qué hay más nuestro que una anchoa?», ríen.

La fiesta de presentación será también una celebración de todo eso: del arte, del diseño, de la colaboración, de lo pequeño y de lo bien hecho. Habrá música, algo para picar y, sobre todo, «muchas ganas de compartir esta pieza única con quienes siempre nos han apoyado».

Y por supuesto, será también una ocasión para tocar, probarse y ver de cerca una gafa que no se parece a ninguna otra. Que no se ha copiado de ningún catálogo. Que no ha cruzado océanos en contenedores. Una gafa que ha nacido en el taller, en el torno, en el pincel, en la conversación entre un óptico y un artista que se han dejado llevar por la creatividad.

«Puede que esta sea solo la primera de muchas. O puede que no. Pero lo que sí sabemos es que esta gafa tiene algo que pocas pueden decir: tiene historia. Y esa historia empieza aquí, en Bilbao, y continúa con cada persona que decida llevarla puesta».

MÁS INFORMACIÓN

Dirección: C/ Ronda, 16. Casco Viejo Bilbao

Teléfono: 946 02 96 76

Web: optikamaldeojo.com

Compartir

Content Service elaborado por SRB Ediciones.