Cómo la ropa que ya no usas puede ayudar a los afectados por el volcán de La Palma
La firma vizcaína Micolet lanza una iniciativa para recaudar fondos para las víctimas de la erupción mediante la donación de aquellas prendas que tenemos olvidadas en el vestidor
La solidaridad, igual que el volcán desde el que brota el magma, sigue exhibiendo su fuerza en La Palma. Numerosas instituciones, empresas y particulares se han volcado con los afectados para devolver la normalidad a la vida de estas personas que, en muchos casos, lo han perdido todo. Los ríos de lava han sepultado la historia, el proyecto vital y los sueños de centenares de familias, destruyendo las casas y las huertas levantadas sobre el suelo volcánico con el esfuerzo de padres, abuelos y bisabuelos. Desde el pasado 19 de septiembre, la que se considera la peor catástrofe natural ocurrida en España en los últimos años ya ha destruido más de un millar de casas, la lava ha cubierto más de 500 hectáreas y miles de kilómetros de carreteras han quedado impracticables. Y según los expertos, la erupción volcánica no finalizará a corto plazo. Pero es también en estos duros momentos cuando se ve el lado más solidario de la humanidad, que se ha unido con fuerza para ayudar a los damnificados a salir adelante. Es el caso de la firma vizcaína Micolet, dedicada a la compra venta 'online' de ropa femenina de segunda mano, que ha querido aportar su granito de arena y sumarse a un volcán de solidaridad que está pugnando por superar al fuego emitido desde las entrañas de la tierra.
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Las autoridades piden que no se envíe más ropa y enseres, e insisten en que la verdadera ayuda que se necesita son las donaciones económicas. Por eso, desde Micolet han lanzado una iniciativa solidaria que convierte la ropa que ha quedado arrinconada y olvidada en el armario en dinero que va a parar íntegramente a la ONG Sonrisas Canarias. «La acogida está siendo muy buena, la gente se está volcando», celebra Olatz Elezcano, responsable de comunicación de la empresa vizcaína. Las personas interesadas en echar un cable lo tienen muy fácil. Solo deben recopilar aquellas prendas en buen estado que ya no usan (un máximo de 15) e introducirlas en una caja. Después, tendrán que rellenar este sencillo formulario en la web de Micolet para solicitar la recogida gratuita. ¡Y listo! En cuestión de horas, un mensajero pasará a recoger el paquete.
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Las prendas serán procesadas rápidamente y puestas a la venta en el armario solidario de Sonrisas Canarias que se puede encontrar en la web de Micolet. De esta forma, quien quiera puede comprar la ropa que ha sido donada y renovar el armario este otoño mientras ayuda a los afectados por la erupción volcánica. «Es importante recordar que necesitamos donantes pero también compradores para que la ropa pueda transformarse en dinero. El procedimiento es muy sencillo y no hace falta que las personas tengan cuenta en Micolet, todo se hace de forma anónima», explica Olatz. Además, recuerda que otra forma de echar una mano es compartiendo esta iniciativa con tanta gente como sea posible, ya que cuantas más personas participen, donen y compren, mayor será la aportación que llegará a La Palma. «Agradecemos mucho la difusión a través de las redes sociales. De hecho, la actriz Nerea Garmendia o la cantante Soraya Arnelas son algunos de los rostros conocidos que nos han ayudado a dar visibilidad a la iniciativa», cuenta.
Un armario solidario lleno de esperanza gracias también a la gran labor que hace la ONG Sonrisas Canarias, que desde el año 2002 ayuda a las familias con menos recursos. En este caso, se volcará con los afectados por la erupción haciéndoles llegar alimentos no perecederos y productos de higiene. «Son muy cercanos y pese a estar saturados, están ayudando muchísimo, atendiendo también a las familias psicológicamente y dedicando todo el tiempo que tienen», cuenta Olatz, que adelanta que mientras el volcán siga expulsando lava, el armario solidario seguirá abierto a ayudar a los que más están sufriendo.
Micolet, la tienda 'online' para dar una segunda vida a tu ropa
Micolet surgió «casi por casualidad», a raíz de un problema común en muchas casas. La pareja de José María del Moral, uno de los socios, tenía el armario «llena de ropa y complementos que ya no utilizaba pero que estaban en buen estado», explica Loroño. Recogieron sus prendas y cuando reunieron 800 en total, gracias a las donaciones de «hermanas, amigas, novias o madres», lanzaron Micolet. Así nació en 2015 en Erandio esta web de compra y venta de ropa de mujer de segunda mano que hoy emplea a 70 personas y tiene un stock de 180.000 prendas. La compañía cuenta ya con más de un millón de usuarias satisfechas en España, pero también vende ropa y complementos en Portugal, Francia, Italia, Bélgica, Polonia y Alemania.
El valor de Micolet reside en la comodidad. Quienes deciden aligerar su armario a través de esta web solo tienen que preocuparse de meter todo aquello que quieren vender en una caja y rellenar e imprimir una hoja de recogida. Micolet se encarga de recoger la caja en casa por 4,99 euros y después verifica el estado de las prendas (se desecha un 15%, que se devuelve a la vendedora o se dona a ONGs). Las valoran con un software propio que tiene en cuenta variables como el color, la talla o la época del año (no cuesta lo mismo un pantalón corto en invierno que en verano). El vendedor recibe un mail con el precio y, si está de acuerdo, se fotografía la prenda y se pone en venta en la página web. Cuando se vende, Micolet se queda con un fijo de 1,5 euros y un 25% del precio. Si la prenda pasa mucho tiempo en el almacén, se va rebajando, pero avisan siempre al vendedor.
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