Los vizcaínos gastaron más de 175 millones en apuestas el año pasado

Las empresas de apuestas comenzaron su andadura en Euskadi en 2008, al conceder el Ejecutivo las tres autorizaciones a Retabet, Kirolbet y Codere. Ya en 2012 les permitió la explotación 'online' del negocio. Por ejemplo, solo Euskal Kirol Apostuak S.A., responsable del nacimiento de Retabet, contaba en esa fecha con 500 terminales desplegadas en estblecimientos de hostelería por toda la geografía vasca y 16 locales específicos.

De la cantidad que recaudaron estos negocios el año pasado -superior en 145 millones a la obtenida un lustro antes-, se repartieron 306,3 millones en premios, así que ingresaron 48,55. En total, se cruzaron 37,5 millones de apuestas, 900.000 más que en 2017, cuando los vascos se jugaron 339,6 millones en este tipo de juego. El dato contrasta con los 9,3 millones de pujas que se realizaron en 2010. Es decir, se han cuadruplicado en ocho años.

Como es lógico, Bizkaia es el territorio en el que más se jugó: se realizaron 20.300.000 apuestas por valor de 175,7 millones, de los que 151 se devolvieron en forma de premios. La actividad más importante se produjo en internet, donde se apostó por valor de 70 millones. Las terminales situadas en locales de hostelería sumaron otros 42,7 y el resto se jugó en corners, salas de apuestas y salones de juegos habilitados también para envites de este tipo.

En toda Euskadi se repite la misma tendencia: la red fue el soporte más utilizado para cruzar apuestas, una vía por la que se recaudaron 146,4 millones, casi seis veces más que cinco años antes.

Aunque la lotería y, después, las máquinas tragaperras siguen acaparando la mayor parte del gasto en juego en el territorio, los establecimientos también crecen. En 2013 había 30 locales de apuestas y 2018 terminó con 33. Además hay otros 35 habilitados dentro de salones de juego. Solo se permiten otros siete más. Pero todavía se pueden explotar más terminales de pujas: hay 2.116, de las que 1.302 están en bares. Y la mitad de todas ellas funcionan en Bizkaia.

La provincia más poblada cuenta con 139 locales de juego: un casino, 112 salones de los que 17 también están habilitados para apostar, 19 casas de apuestas y siete bingos. El auge de estos negocios ha coincidido con un aumento de casos de ludopatía, según las asociaciones que tratan estas adicciones. Por ejemplo, la asociación Ekintza-Aluviz de Bizkaia atendió a 256 nuevos afectados el año pasado.

Los últimos estudios oficiales apuntan que el 2,5% de la población presenta un transtorno de juego patológico. Es decir, unos 43.000 vascos. De hecho, el Ejecutivo ha creado el Observatorio del Juego para poder realizar un diagnóstico actual y, en su caso, tomar medidas como legislar de forma diferente las distancias de los locales de juego a centros escolares. Aun así, se trata de un sector muy controlado por la Ertzaintza, que el año pasado realizó 3.700 inspecciones: 167 en casinos, 308 en bingos, 445 en salones , 46 en locales de apuestas y 2.132 a máquinas tragaperras.

Como resultado, la Policía autonómica tramitó 207 expedientes, 45 por vulnerar la legislación vigente. Por ejemplo, se apercibió a 4 menores por jugar, a 11 establecimientos por permitírselo y a 8 por dejar que estuvieran dentro. Dos negocios fueron sancionados por juego ilegal, cuatro por irregularidades en las máquinas y once por incumplir el horario de cierre.