«A veces somos muy quejicas»
Itxaso Erroteta| Concejala de Juventud y Deporte ·
Bilbao quiere potenciar el deporte entre los jóvenes en todos los barrios porque «sus valores son una herramienta para mejorar la sociedad»Itxaso Erroteta (Barakaldo, 1970) es concejala de Juventud y Deportes de Bilbao y ha hecho dos maratones. El primero, el de Martín Fiz, lo terminó ... en cinco horas y llegó la última. En el segundo, en Estocolmo, bajó a cuatro horas y veinte minutos. Entre medias, naturalmente, hubo cierto padecimiento físico. El deporte, ya se sabe. «Muchas veces somos muy quejicas», admite. Y una buena medicina para los lamentos caprichosos es la disciplina que exige la práctica deportiva.
- ¿Por qué?
- Porque te marcas objetivos y el camino para alcanzarlos es duro, pero lo puedes conseguir con constancia, con la ayuda de tus compañeros... Al final, los valores del deporte son una herramienta para mejorar la sociedad.
- ¿Qué valores son esos?
- Esfuerzo, trabajo en equipo, inclusión, igualdad, participación...
- ¿Qué hace el Ayuntamiento de Bilbao para animar a los jóvenes a hacer deporte y asumir esos valores?
- Lo primero es tener unas infraestructuras en buenas condiciones. Y lo segundo, hacer más y mejores cursos, jornadas de puertas abiertas... Estamos empeñados en que desde las edades tempranas se adquieran hábitos saludables y que el ocio pase por la práctica deportiva porque es algo que te va a ayudar en tu desarrollo como persona. Lo hacemos en los haurgunes y kidegunes, proponiendo actividades físicas variadas. Al fin y al cabo, el 50% de la salud de cada uno depende del estilo de vida que lleve, y sólo el 20% de la genética.
- Gestionar el área de Juventud es un reto: cada vez hay menos jóvenes y hay que cuidarlos bien para evitar que se vayan.
- Totalmente. Estamos empeñados en hacer de Bilbao una ciudad atractiva para la juventud, y para diseñar los programas debemos ir de la mano con ella, escuchar a los jóvenes.
- ¿Y qué piden?
- Quieren participar. Por eso estamos diseñando políticas de participación, como el concurso de ideas GazteKluba, los premios Balioak Martxan, el programa Diseña tu Evento... Hacemos salidas en piragua, concursos de skate, salidas al monte, surf en Sopelana. En GazteKluba están apuntados 1.500 jóvenes de entre doce y diecisiete años y nos cuentan una cosa muy interesante: están conociéndose chavales de distintos barrios, se están integrando, socializando... La actividad física también ayuda a eso.
- ¿No percibe cierto desencanto en la juventud ante la falta de perspectivas que les amenazan?
- Lo que veo es que tienen energía, ganas de hacer cosas, ilusión. Les propones algo y participan. Además, la juventud está formada y las personas formadas yo creo que pueden encontrar un empleo y desarrollar un proyecto de vida.
- ¿Es Bilbao un buen sitio para ser joven?
- Por supuesto. En otras áreas del Ayuntamiento están trabajando en políticas de vivienda, emancipación, en la cultura del emprendimiento... En relación a esto último las iniciativas que nosotros ponemos en marcha también ayudan, incentivan ese ánimo empendendor: hemos visto como surgían proyectos para cultivar hongos comestibles en posos de café, hacer jardines verticales en centros educativos, otros de carácter más tecnológico...
«Queremos que desde edades tempranas el ocio pase por la práctica deportiva»
Hábitos saludables
«Un montón de posibilidades»
- Una de las acciones que recoge el plan de mandato hasta 2023 es mejorar en clave de proximidad la programación de ocio y deporte para adolescentes. ¿Cómo se va a hacer?
- Se trata de fomentar actividades en los Gaztegunes de los barrios. En Bilbao tenemos un montón de posibilidades, como el paseo de la ría o el anillo verde, la red de bidegorris, parques... Las zonas verdes se están potenciando para la práctica de actividad física. Por ejemplo, con las máquinas de calistenia.
- ¿Perdón?
- Se trata de una disciplina que se practica al aire libre, en barras, valiéndose del peso de tu propio cuerpo. El nombre viene de las palabras griegas kallos (belleza) y sthenos (fuerza). Hay que lograr que los chavales se enganchen a este tipo de prácticas por lo que tiene de desarrollo en grupo, de reto, de hacernos mejores físicamente. Además, apenas hace falta inversión.
- También quieren fomentar el voluntariado. ¿No es difícil en un momento tan individualista?
- En Bilbao están trabajando muchas organizaciones del tercer sector y lo que queremos es darle visibilidad para que tenga un efecto contagio. Es como cuando se ve a gente haciendo deporte por la calle: al final hay mucha más gente que se anima.
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