Tratan otras 4.000 hectáreas contra la peste del pino
La Diputación repite el sistema experimental para que se fortalezcan los árboles y soporten los envites de los hongos que les atacan desde 2018
La enfermedad provocada por varios hongos de los géneros dothistroma y lecanosticta, que causan las enfermedades denominadas de la banda roja y la banda marrón, ... provocó la pérdida de muchos pinares de Bizkaia, obligando a cortar miles de ejemplares y causando graves pérdidas económicas a los forestalistas desde 2018. La peste que amenazaba con terminar con el 45% de la superficie arbolada de Bizkaia sembró el pánico entre los propietarios de terrenos. La Diputación incluso recurrió a expertos en Nueva Zelanda y en Chile, donde los parásitos también hicieron de las suyas. Aunque la tala de más de 11.500 hectáreas en los últimos cuatro años y la sequía redujeron la incidencia de la epidemia en las plantaciones el año pasado, la enfermedad sigue presente. Y este año, la Diputación ha seguido aplicando un tratamiento experimental sobre 4.000 hectáreas en la zona de Durango y Arratia-Nervión. Una superficie boscosa similar al tamaño de 211 parques como el de Etxebarria, donde se instala el ferial en las fiestas de Bilbao.
El Servicio de Montes del Departamento de Sostenibilidad y Medio Natural empezó en 2021 a aplicar este nuevo tratamiento experimental en las mismas comarcas. «La incidencia se ha reducido, pero no ha desaparecido. Y este tratamiento, totalmente inocuo, pretende fortalecer los árboles, para que sean capaces de resistir mejor a la enfermedad.
Los primeros resultados han sido positivos, pero es necesario seguir reincidiendo en las mismas zonas para comprobar los efectos a más largo plazo», explicó una portavoz del área foral de Sostenibilidad y Medio Natural. Y es que aunque estén afectados, hay árboles resistentes que pueden convivir durante toda su vida con la infección. «No se trata de un antídoto, pero sí tiene efectos positivos en la salud de los árboles, que se vuelven más fuertes», reiteraron fuentes del área.
La Diputación inició los trámites declarando las labores de utilidad pública. El tratamiento se ha aplicado los primeros días de este mes y el inicio de las labores se comunicó con antelación a los ayuntamientos afectados y a la Asociación de Forestalistas. Se han definido las zonas de actuación a partir de la actualización del mapa de afecciones realizado por la Fundación Hazi el año pasado. Las áreas preferentes en las que hay que actuar están en Elorrio, Atxondo, Garai, Iurreta, Berriz, Durango, Amorebieta, Zeanuri, Dima, Igorre, Areatza, Zeberio y Orozko, donde en total hay 7.545 hectáreas afectadas.
Mezcla de sustancias naturales
Fuentes del área recordaron que el producto con el que se han tratado estas zonas está fabricado a partir de sustancias naturales que potencian la actividad del arbolado frente a condiciones climáticas adversas y que lo hacen, así, más resistente a la enfermedad. Fue testado por Neiker durante 2020 en el marco de una investigación para hallar soluciones sostenibles para reducir el impacto de la banda marrón y la banda roja del pino en la que participan las tres diputaciones y el Gobierno vasco. «No es un fitosanitario, sino una mezcla de sustancias naturales con nutrientes y bioestimulantes que activan la defensa de los árboles frente a la enfermedad. Es un producto autorizado para su empleo en la agricultura ecológica que no tiene efectos adversos en el medio ambiente», insistieron desde el área.
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