«No me pegues, no me mates por favor»
Una mujer de 49 años fallece apuñalada por su marido en Aranda de Duero, que se resistió durante una hora a abrir la puerta a la Policía
susana gutiérrez
Lunes, 18 de julio 2016, 02:20
No había denuncias y nadie sospechaba nada. La sorpresa, la consternación y la repulsa eran los sentimientos dominantes entre los vecinos del número 28 de la calle Fernán González del barrio de Santa Catalina, de Aranda de Duero. En ese edificio llevaba viviendo durante «toda la vida», Benita Núñez Peña, una mujer de 49 años, la última víctima de violencia machista, que falleció ayer de madrugada presuntamente asesinada por su marido, José Villalibre Mogrovejo, de 54 años. El cuerpo de la víctima presentaba fuertes golpes y heridas por arma blanca.
Fue un vecino quien, sobre las tres de la mañana, llamó a la Policía Nacional tras escuchar una gran discusión y los gritos de la víctima pidiendo auxilio. «Mi hijo había venido a pasar el fin de semana; está muy conmocionado porque escuchó todo y cómo Beni rogaba a su marido que dejara de pegarle», detalla África, la vecina del segundo F. Los terribles hechos se producían en el piso de enfrente, en la letra D. «Ella gritaba: No me pegues más, no me mates por favor», explica conteniendo las lágrimas.
El presunto homicida se negó durante casi durante una hora a abrir a los agentes, quienes tuvieron que amenazar en varias ocasiones con tirar la puerta abajo, según relata la testigo. La pareja estaba sola esa noche, ya que sus dos hijos, de 22 y 25 años, no se encontraban en el domicilio en el momento del suceso. «La hija trabaja fuera y el hijo estaba por ahí; le tuvieron que avisar y llego muy conmocionado», añade. También acudieron al lugar, alertadas por los agentes, dos de las hermanas de la víctima, que vivieron momentos dramáticos. Por su parte, los equipos sanitarios del servicio de emergencias solo pudieron certificar la muerte de la mujer, que presentaba fuertes golpes y varias heridas por arma blanca.
Al menos 25 mujeres muertas en lo que va de año
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Benita Núñez es la segunda víctima mortal por violencia machista en Castilla y León en lo que va de año y la vigésima quinta en el conjunto de España. Según datos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, recogidos por Europa Press, las mujeres muertas a manos de sus parejas o exparejas en lo que va de año ascienden a 25. Sin embargo, la cifra podría superar la treintena, ya que hay seis casos en investigación.
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La última falleció en Frigiliana (Málaga) hace cinco días y la anterior, el 23 de junio, en San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria). De total, once habían presentado denuncia y en otros dos casos fue interpuesta por otras personas. Además, ocho solicitaron y obtuvieron orden de protección, que dos tenían en vigor cuando se produjo el homicidio, y otra renunció a ellas.
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En cuanto al país de origen, 15 eran españolas. En 16 casos convivían con su agresor. Los datos de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género ponen de manifiesto que 14 niños se han quedado sin madre.
Una relación «normal»
La pareja residía en ese edificio desde hace casi tres décadas (la víctima desde hacía aún más tiempo, ya que antes vivió con su madre vivió en otro piso del mismo inmueble). Benita era peluquera y en los últimos meses trabajaba en el céntrico establecimiento Diagonal, mientras que su marido era operario en la empresa local Harinera Arandina.
Todos los vecinos señalan que nunca vieron nada raro en la pareja. «Mantenían un comportamiento muy normal, siempre iban juntos a todos los sitios», detallan dos mujeres impactadas por la noticia. «No escuchamos nada por la noche, nos acabamos de enterar», añaden. Una tercera vecina comenta que oyó golpes y ruidos: «Pensé que venían del ascensor».
Todos los testimonios señalan que el marido era una persona «normal, aunque quizá poco comunicativo». La pareja, indican, aparentaba estar muy unida, nunca se escucharon discusiones subidas de tono. En cualquier caso, tras ser interrogados por agentes policiales ponen algo de luz al asunto : «Hemos prestado declaración esta mañana y al parecer, por lo que nos han planteado, h an dado a entender que tenían problemas desde hacía un mes, pero nosotros no sabíamos absolutamente nada», concluye la testigo.
Villalibre prestó declaración durante toda la mañana de ayer en el juzgado de Aranda, cuyo titular ordenó el ingreso en prisión. El Ayuntamiento de la localidad ha decretado tres días de luto.