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Lunes, 14 de diciembre 2015, 18:27
La señora Wu estaba viajando de Bangkok a Xian en un vuelo de la compañía AirAsia cuando se encontró con un imprevisto desagradable. La pasajera que iba sentada en el asiento de detrás se descalzó los pies y los colocó en su reposabrazos.
Wu decidió llamar a una azafata para comunicar el problema. La azafata dijo que la pasajera descalza era tailandesa y no sabía chino, por lo que le preguntó en inglés si podía ser tan amable de poner los pies en el suelo, pero se negó a hacerlo. Ante esta negativa, la auxiliar de vuelo le comunicó a Wu que hablara y se encargara ella personalmente del problema.
Cuando le preguntaron a Wu si estaba satisfecha con el viaje, declaró: «No, no estoy contenta con el vuelo ni con la actitud del personal. Tienen la obligación de detener el comportamiento incivilizado de los viajeros». «Aunque es una aerolínea de bajo costo, el servicio no debería ser malo». Después de llegar a destino Wu decidió publicar las imágenes de la pasajera descalza y contar su historia.
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