Terrazas con malos humos

La aprobación de la ley antitabaco, hace cuatro años, no solo conllevó la desaparición de los malos humos en locales públicos cerrados sino que, además, trajo consigo un fenómeno colateral: el boom de las terrazas, la estrategia que utilizó el sector hostelero para no perder a sus clientes fumadores y la tabla de salvación para los adictos a la nicotina que querían seguir saboreando un pitillo en su bar favorito. No solo han proliferado como hongos, también han aumentado su tamaño y se han sofisticado para vencer las inclemencias del tiempo con techos, paredes, toldos y hasta sistemas de calefacción. Pero en algunos casos, la evolución de las terrazas -un recinto ideado en origen para tomar algo al aire libre aprovechando el buen tiempo- ha ido tan lejos que, paradójicamente, han dejado de serlo: muchos bares cuentan ahora con recintos práctica o totalmente cerrados donde se concentran los fumadores mientras los no fumadores se ven condenados a recluirse dentro del local. ¿Pero es esto legal?

Según un reciente estudio realizado de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), un 87% de los locales con terraza cerrada o abierta únicamente por uno de sus lados no respetan la ley antitabaco al permitir fumar. La normativa, en este sentido, es clara: no se podrá encender ni un cigarrillo si están cubiertas por arriba y, al mismo tiempo, rodeadas por más de dos paredes, ya sean permanentes o de lona.

Bilbao y Madrid

La OCU sacó esta conclusión tras visitar unos 200 bares, cafeterías y restaurantes por todo España; las ciudades en las que se detectaron más incumplimientos fueron Bilbao y Madrid. Mientras comprobaron que en el interior de los bares se cumple rigurosamente la prohibición, de las 121 terrazas cerradas o abiertas únicamente por uno de sus lados que encontraron en 106 se permitía fumar. "Una proporción altísima que demuestra que los incumplimientos están a la orden del día", lamentan los responsables del sondeo.

La ley antitabaco considera la habilitación de zonas de fumadores fraudulentas como una infracción grave de la ley, castigada con multas de entre 601 y 10.000 euros. En cambio, para el fumador es falta leve, salvo que sea reincidente. "Se está permitiendo este fraude generalizado en las terrazas porque la Policía Local y otros cuerpos de seguridad, en general, desconocen como actuar en estos casos y jamás lo hacen de oficio", apuntan desde la asociación Nofumadores.org, para recordar que tampoco cuando las superficies cubiertas exceden del 50% del total se puede fumar. En el momento que se supera este porcentaje, los encargados del local "deben retirar los ceniceros y señalizar el espacio con carteles de 'prohibido fumar' para que no haya lugar a duda".

Sin embargo, es "muy habitual" encontrar "tres y hasta cuatro paramentos en las terrazas mientras se permite en su interior". "Algunos hosteleros juegan con la ambigüedad en beneficio de los fumadores y en perjuicio de los que no lo son, incluso permitiendo la entrada de menores y haciendo la competencia desleal a aquellos establecimientos que sí que cumplen la normativa", lamentan.

En parques y hospitales

Las 'terrazas trampa' constituyen el caso de incumplimiento más flagrante, según la OCU, pero no el único. La OCU también sondeó la situación en otros 200 edificios e instalaciones públicas para constatar que se salta la ley con demasiada frecuencia en las zonas circundantes de hospitales, parques infantiles y centros de enseñanza donde, aunque estén al aire libre, tampoco se puede fumar. En el 60% de los aledaños de colegios e institutos se encontraron fumadores al igual que en un 89% en el caso de hospitales; en algunos centros sanitarios, incluso, se saltaba la norma en pasillos, escaleras, el parking o la cafetería. En las universidades, el porcentaje de incumplimientos se elevó al 100% de los casos.

La OCU informará de estos resultados al Ministerio de Sanidad y exigirá "más inspecciones". Los consumidores no fumadores también pueden actuar en lugar de quedarse confinados en el interior del bar: así, si detectan una infracción de la ley, pueden poner una reclamación en el mismo local o presentar una denuncia en cualquier registro del Gobierno vasco, que también tiene habilitadas vías para realizar quejas y sugerencias en el teléfono 902 471818 o en el correo electrónico tabakoa@ej-gv.es