La ruta aérea con Madrid se estanca y preocupa a un tejido empresarial que aún ve lejos el TAV

Sin embargo, en este contexto de buenas noticias, el enlace con la capital sigue estancado. Un hilo de comunicación que es vital para Bizkaia y su tejido empresarial. Desde 2019, 'La Paloma' ha ganado 1,86 millones de nuevos usuarios (+15%). El tráfico con Barajas, por el contrario, ha perdido casi 30.000 (-3%). Es decir, ahora volamos menos a Madrid que antes de la pandemia, en un momento en el que la práctica totalidad de las rutas ha registrado un importante avance con respecto al periodo previo al covid.

Los clientes hablan de oferta escasa y «menguante» en algunos momentos del año, cuando las dos aerolíneas que prestan servicio (Iberia y Air Europa) consideran que se detecta un bajón en el viaje de negocios. Otra de las quejas se refiere a los precios «elevados» en la franja de horario matinal, en comparación con otra rutas. «Lo que no puede ser es que sea más caro viajar a Madrid que a Londres», sintetiza un portavoz del Círculo de Empresarios, entidad que lleva años mostrando su preocupación por el estado de esta conexión y la ausencia de un tren de alta velocidad que le pueda plantar cara y generar una competencia «de verdad». El TAV no se espera que llegue a Basauri antes de 2028 y faltarán aún varios años más para que el viajero pueda subirse cómodamente al rápido vagón desde el centro de Bilbao.

Destinos por número de pasajeros

Por puestos en el ranking

Para los empresarios el número de vuelos es «insuficiente» en algunas franjas horarias y en momentos puntuales del año. El problema es que la debilidad de esta conexión, unida a la ausencia de la alta velocidad, constituye, a juicio del Círculo de Empresarios, «una desventaja competitiva» para las compañías. «Los centros de regulación económica están en la capital y es muy importante tener lazos ágiles, eficaces y a un coste contenido», inciden.

Los números de la conexión con Madrid hablan por sí solos. Sigue siendo el enlace más utilizado del aeropuerto. El año pasado registró un flujo de 809.740 clientes, superando en 115.000 pasajeros a Barcelona. Los vuelos a la capital crecieron un 3,7%, pero siguen por debajo de los 835.235 pasajeros de 2019. Además, el peso total de los desplazamientos a Barajas sigue cayendo en relación al resto de destinos. Hoy en día, el tráfico con la capital representa el 12% del total. En el pasado, este dato llegó a alcanzar el 25%. Es decir, uno de cada cuatro viajeros que acudía a Loiu ponía rumbo o venía de Barajas. Ahora, solo lo hace uno de cada diez.

Esta pérdida de relevancia no es mala en sí misma para el aeropuerto. Sobre todo si se aborda la conexión de Madrid como una escala intermedia hacia otros destinos. Y es que en la actualidad el pasajero de largo radio que parte de Bilbao puede optar por 'hubs' como Amsterdam, París o Fráncfort para agilizar su periplo. Ya no hace falta pasar por la capital para contar con un buen número de opciones.

Sin embargo, tanto los empresarios como clientes habituales siguen lamentando que el punto a punto (el tráfico de reuniones y negocios entre Bizkaia y Madrid) sigue siendo «muy mejorable». Es algo que ya lo advirtió la anterior directora de Loiu, Cristina Echeverría: «Necesitamos una oferta con la capital más amplia y a precios más razonables». Lo lanzó en 2019, en mitad de un desayuno de la Asociación de Directivos y Profesionales de Euskadi (ADYPE) celebrado en el Hotel Carlton, ante un público que precisamente es usuario habitual del enlace.

El actual director, Iván Grande, es algo más cauto, aunque comparte, en cierta manera, este planteamiento. Pide más competencia para que el viajero se beneficie. «Lo ideal es que tuviéramos más compañías interesadas en operar en esta ruta (solo hay dos), que sigue siendo la conexión estrella, para poder mejorarla».

¿Hay mercado para una tercera aerolínea? Los últimos estudios del aeropuerto revelan un descenso importante en el viaje de negocios en 'La Paloma'. Ha caído 9 puntos desde 2018 y cinco más si se mira a 2016 (ha descendido del 40 al 27%). Y el enlace con Barajas es el viaje por motivos laborales por excelencia.

Evolución animada del año a año

¿Qué puede suceder a medio plazo? Que una tercera aerolínea se decida a disputarle a Iberia el mando en el enlace con la capital se antoja difícil. Solo Ryanair se atrevió a hacerlo. Fue en 2012 y la 'low-cost' cosechó un sonoro fracaso. Al de unos pocos meses acabó por abandonar la ruta. Una posibilidad que, en su día, antes de la pandemia, se veía con muy buenos ojos era la de Volotea. La firma de bajo coste suscribió un acuerdo precisamente con Iberia y Air Europa para entrar en la conexión Bilbao-Madrid. Era una maniobra que le interesaba a todas las partes ya que evitaba el monopolio que se iba a producir con la anunciada fusión entre Iberia y Air Europa. Sin embargo, esta difícil operación se acabó frustrando y Volotea se ha quedado fuera de juego.