La A-8 recupera la normalidad tras casi cuatro horas de retenciones por la operación salida de vacaciones

La A-8 ha recuperado la normalidad tras casi cuatro horas de retenciones por la operación salida de las vacaciones de agosto. La afluencia masiva de vehículos ha generado hasta 9 kilómetros de atascos sentido Cantabria. Desde algo antes de las dos de la tarde, el tráfico ha estado parado en determinados puntos entre Sestao y El Haya, en la muga con la provincia vecina. Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, el atasco ha sido fruto de alta densidad de tráfico que ha generado la salida masiva de ciudadanos.

Último viernes de julio es sinónimo de vacaciones y por tanto, de circulación intensa y problemas en el tráfico. Y más aún en la A-8, donde los viernes por la tarde, cuando muchos ciudadanos que salen de trabajar también abarrotan esta vía para disfrutar de un fin de semana en sus segundas residencias en municipios como Laredo, Noja o Castro Urdiales. Los problemas han comenzado sobre las 2 de la tarde. Fruto de esta densidad de tráfico se ha producido un choque entre dos turismos en la AP-8, en Portugalete, a la altura de Nervacero, pero no se han registrado heridos.

También otras carreteras vizcaínas han presentado problemas. La circulación es densa, y en algún punto los coches tienen que pisar el freno, en La Avanzada, sentido Getxo, unos atascos también habituales los viernes a primera hora de la tarde. Por otro lado, el tráfico se ha complicado en la N-634, a la altura de Etxebarri, por la colisión entre tres vehículos y también se han generando retenciones, y en el túnel de Malmasin un camión ha perdido la carga y ha afectado a uno de los carriles.

Por el momento, no se han registrado accidentes de gravedad, pero desde las autoridades piden precaución. Se trata de un día en el que hay que prestar especial atención si salimos a la carretera. Quienes viajan a otros puntos del país como el sur o el Meditérraneo también han sufrido las consecuencias de la operación salida. Los peajes de Armiñón y Etxabarri-Ibiña, en Álava, y el desvío a Burgos desde la N-22 siguen experimentando problemas por «tráfico intenso» por la salida masiva de ciudadanos a sus destinos vacacionales, por lo que se recomienda circular con especial cuidado por esa zona.

Lo mismo ocurre en el nudo de Armiñón debido a la gran afluencia de vehículos procedentes de Europa y con destino al sur de la península. En este caso, las colas alcanzan los 3 kilómetros. En Álava también se registran problemas en en el cruce de la N622 y la A-1, en Vitoria, con cerca de 2 kilómetros de caravana.

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