El estanque del parque Europa es un rincón de biodiversidad que en los últimos meses ha sido colonizado por las ratas. jordi alemany

Las ratas de Bilbao se van a comer al parque Europa

Con la caída de la hostelería hay menos residuos en los lugares habituales, así que ahora buscan el alimento que se echa a los patos y los gatos en la zona verde

Jueves, 29 de abril 2021, 01:46

Es todo un espectáculo asistir al festín que se dan las ratas en el estanque del parque Europa. Es tan visible la plaga que en ... los últimos tiempos varios vecinos se han quejado al Ayuntamiento. Y sí, tienen razón. La presencia de roedores en este espacio verde se ha incrementado muchísimo y los técnicos municipales ya han empezado a tomar medidas. Es más, se plantean actuaciones futuras de calado si no se pudiese contener la voracidad de estos bichos. Las actuaciones competen a tres áreas: Salud y Consumo, Servicios y Calidad de Vida, y Medio Ambiente.

Publicidad

¿Qué está pasando? Desde este último departamento apuntan que el fenómeno tiene que ver con la crisis generada por la pandemia. Como punto de partida, recuerdan que las ratas se alimentan, fundamentalmente, de desperdicios, de basura. Esa que corre por las alcantarillas en el subsuelo, o que se deposita en la superficie. Lo que ocurre es que con el descenso de la actividad, muy especialmente en el sector de la hostelería, esos residuos se han reducido en buena parte de la ciudad. De manera que, según los expertos municipales, los animales se desplazan hasta donde hay alimento.

Una batería de medidas combatirá a los roedores, pero, si no son suficientes, se plantea incluso retirar el agua del estanque

Y en el parque Europa lo hay. El motivo es que se da allí una «sobrealimentación» a las aves migratorias que lo pueblan -especialmente, patos- y también a «alguna colonia de gatos». En fin, desde el Ayuntamiento señalan que ese hábito de alguna gente de echar de comer a los animales no solo no es una buena idea, sino que genera residuos que hacen el lugar muy atractivo para las ratas. «Siempre las ha habido, pero ahora se están viendo mucho, y este es un fenómeno que no se daba».

Las autoridades municipales en materia de Salud ya han tomado las primeras medidas: para comenzar, la instalación de cebos y trampas contra roedores, mecanismos habituales en las campañas de desratización. Segundo, «hemos dejado de alimentar a los patos». Es algo que hacía el Ayuntamiento, poner comida en el estanque para animar a las aves en proceso migratorio a que parasen allí y enriquecer la biodiversidad del lugar.

Publicidad

jordi alemany

Cierres y siegas

Otra medida que se va a tomar de manera inminente es intensificar la retirada de residuos alimenticios en la zona con la llegada más frecuente de brigadas de limpieza. Pero, de manera especial, se va a incidir en la sensibilización, en hacer entender a la gente «que no tiene que echar comida a los animales».

¿Y si nada de esto es suficiente? Aún hay más actuaciones que se plantean en caso de que no cese la presencia de ratas. Por ejemplo, «el cierre de las escolleras de piedra», donde estos animales se esconden. Incluso se piensa en proceder a la siega de ciertas áreas con vegetación que también actúan como refugio para los roedores. En cuanto a la colonia de gatos, los técnicos están analizando si se podría desplazar a otro lugar donde genere menos problema.

Publicidad

Como última posibilidad, drástica y remota, estaría retirar el agua del estanque. Es algo que se quiere evitar a toda costa porque se perdería un logro ambiental importante de la ciudad. Hace cinco años se renaturalizó la zona y se hizo que el cauce de agua fuese vivo, y no el charco estancado de antes, que había que rellenar cada quince días. Aquello pasó a ser un rincón de biodiversidad en plena mancha urbana que ahora las ratas amenazan.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad