Precios bajos con la primera visita y las urgencias, gratis: así funciona la clínica odontológica social de la UPV/EHU
El objetivo es atender a gente que no dispone de recursos para acudir a clínicas privadas, al tiempo que se forma a futuros profesionales
La clínica odontológica social de la UPV/EHU que llegará a Bilbao en el curso 2027-28 funcionará en los periodos lectivos (ahora no ... está abierto el plazo para la inscripción de nuevos pacientes) y la primera consulta, igual que las urgencias, será gratis. En sus actuales instalaciones, en Leioa, el coste de los diferentes tratamientos está por debajo de los precios de mercado. Así, una endodoncia cuesta entre 60 y 75 euros, y una prótesis removible completa, superior e inferior, 650.
Los números que maneja la clínica a día de hoy son de 2.000 clientes al año y unos 10.000 tratamientos. La intención es que en Bilbao, ganando dimensión y centralidad, aumente su capacidad y también el volumen de pacientes. De lo que se trata es de ofrecer tratamientos a personas vulnerables o de bajos ingresos, unos tratamientos que son prestados por estudiantes de Odontología monitorizados por su profesorado. Se busca así el doble objetivo de atender a gente que no dispone de recursos para acudir a clínicas privadas, al tiempo que se forma a futuros profesionales.
La clínica de la UPV/EHU, que estará ubicada en la nueva torre de Panera, en la avenida Zumalacárregui, también tiene su encaje en la ambición de Bilbao de convertirse en ciudad universitaria, empeño en el que el Ayuntamiento lleva años trabajando y que este miércoles recordó Aburto con énfasis, mencionando también la facultad de Medicina de Basurto. Se trata de apuntalar a Bilbao como referente académico, cultural y de innovación. En palabras del rector, «la Universidad del País Vasco será un agente estratégico».
También se va a incidir en la prevención y la educación. Porque más allá del tratamiento, esta clínica quiere tener un papel relevante en la promoción de la salud bucodental y la prevención de enfermedades, apuntó el rector. A través de programas educativos y cribados «pueden llegar a la comunidad y fomentar hábitos saludables desde edades tempranas, reduciendo la incidencia de problemas a largo plazo y mejorando la calidad de vida general». También mencionó la colaboración con instituciones como la Diputación para atender a mayores en residencias.
Por último, el alcalde Aburto recordó que «queremos ser atractivos tanto a nivel internacional, para que vengan jóvenes y buenos profesionales a nuestra ciudad, como en el entorno: que nadie tenga necesidad de salir de Bilbao por falta de oportunidades».
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