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De puertas afuera el mensaje es de tranquilidad y «naturalidad». El consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, restó ayer gravedad a la presencia mañana de 4. ... 000 hinchas del Rangers en Bilbao, pese a que la mitad aterrizarán sin entrada, y lo desligó de los graves incidentes registrados hace apenas unas semanas durante la visita de la Roma a San Mamés. Sin embargo, a nivel interno el ambiente que se percibe es muy distinto. Hay preocupación. Los ertzainas que participarán en los dispositivos organizados para el partido de mañana entre el Athletic y el Rangers -y en menor medida para el duelo de hoy entre el Bilbao Basket y el PAOK de Salónica- saben que se enfrentan a una prueba de fuego. A escasas semanas de que se celebre la final de la Europa League en Bilbao, los encuentros europeos de esta semana son recibidos como un 'test de estrés', una ocasión de demostrar la capacidad de las instituciones vascas de garantizar la seguridad pública en los grandes eventos deportivos. Y, como viene siendo habitual, gran parte de la preocupación de los especialistas policiales se centra en los aficionados radicales del conjunto rojiblanco, que han estado detrás de muchos de los incidentes.
El dispositivo conjunto diseñado entre la Ertzaintza, la Policía Local y el Athletic para este partido de vuelta de cuartos de final, clave en las aspiraciones rojiblancas, lleva preparándose desde hace tiempo. No se han escatimado recursos. Se ha movilizado a todos los ertzainas de Brigada Móvil disponibles, también los que se encuentran de semana libre. En total habrá más de 250 antidisturbios durante toda la jornada. También se han reforzado los turnos de Seguridad Ciudadana de la ertzain-etxea de Bilbao. Y prácticamente todas las comisarías de Bizkaia enviarán agentes de refuerzo, algo que suele ser habitual en los operativos especiales.
El despliegue será todavía mayor el día de la final europea -el 21 de mayo-, cuando está previsto que, con independencia de si el Athletic es uno de los contendientes, incluso acudan de refuerzo ertzainas de comisarías guipuzcoanas y alavesas. Pero los responsables policiales saben que mañana es una cita muy importante. Lo es porque no quieren que se repita lo que pasó contra la Roma, cuando el «retraso» en el traslado de los hinchas italianos provocó, en parte, que se encontrasen con radicales del Athletic en las inmediaciones de la gran valla que se ha instalado para mejorar la seguridad.
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Según las fuentes consultadas, la idea es tratar de agilizar el traslado de los aficionados escoceses desde la calle Iparraguirre, donde están citados a las 6 de la tarde, hasta el estadio. Y también mejorar la seguridad de la explanada (tanto fuera como dentro de la valla) para evitar los enfrentamientos que se produjeron en ese punto el día del partido contra la Roma.
Lo cierto es que, a pesar de la gran importancia que se da al evento, el partido de ida celebrado en la ciudad británica «invita al optimismo» por el buen ambiente que se respiró entre ambas aficiones y la ausencia de incidentes. La discoteca Sonora ya ha vendido unas 300 entradas para aficionados escoceses que llegarán sin entrada y verán el encuentro allí. Los responsables del local nocturno de Erandio creen que podrán vender bastante más y llegar a acoger a unos 900 escoceses. La previsión es que la mayoría de los que lleguen sean familias y grupos de amigos «normales». La Ertzaintza, de hecho, enviará patrullas a la discoteca, pero no ha previsto ningún tipo de dispositivo especial para este establecimiento. Y es que, ahora mismo, la preocupación se centra en lo que pueda ocurrir en Bilbao y, sobre todo, en el grupo de radicales locales que vienen generando incidentes en muchos de los partidos europeos del Athletic.
En este contexto, el consejero de Seguridad del Gobierno vasco lanzó ayer un mensaje de tranquilidad. Bingen Zupiria pidió que la situación se afronte con «naturalidad» y la comparó con la reciente visita de hinchas vizcaínos a Escocia y el éxodo masivo a Sevilla para la final de Copa, eventos en los que no se registraron altercados. En todo caso, aseguró que la Policía autonómica estará «muy presente» y hará «todo lo que tenga que hacer para evitar actos vandálicos».
El consejero eludió precisar el número de efectivos que estarán en la calle estas jornadas y si serán más o menos que los que se desplegaron durante el partido del Athletic con la Roma. Insistió, en este sentido, en que esta cita deportiva «es una oportunidad para mostrar y disfrutar de la ciudad, ese debe ser el objetivo principal», recalcó.
La Policía autonómica tiene constancia de que 26 de los 500 aficionados griegos que acudirán hoy al Pabellón de Miribilla acompañando al PAOK de Salónica en el partido de ida de la final de la FIBA Europe Cup tienen antecedentes y son «potencialmente peligrosos». Esta condición, que estén perfectamente identificados, no ha impedido en todo caso que hayan logrado entrada en su país de origen del cupo que el Bilbao Basket debe reservar para los seguidores visitantes -el 5% del total del aforo-. Tampoco está previsto que sean retenidos durante la celebración del encuentro de esta noche, tal y como sí ha ocurrido alguna vez con aficionados ultras de equipos españoles y europeos que han visitado San Mamés.
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