La OTA empieza a funcionar con normalidad en San Ignacio, Ibarrekolanda y La Peña

Las máquinas ya emiten los tickets para aparcar con absoluta normalidad, lo que ha desatado mayor incertidumbre entre los conductores que aparcan en las calles afectadas. Es el caso de Aitor Artetxe que, al ver pasar al 'batiscafo' (el coche de la empresa gestora que lleva las cámaras para imponer las sanciones) ha optado por pagar «para curarme en salud, aunque la verdad es que lo que tenía entendido es que esta semana no iban a multar».

Efectivamente, las pocas máquinas que han funcionado desde un principio en La Peña (expendedoras ya usadas que se habían quitado del centro de la ciudad) ya advertían desde el lunes que el servicio tendría un carácter meramente informativo toda esta semana y también ayer martes el director de Movilidad subrayaba que iban a garantizar varios días de transición para que los vecinos se fueran acostumbrando al nuevo servicio. Sin embargo, fuentes municipales consultadas han eludido concretar cuándo se empezará a sancionar el estacionamiento sin ticket.

Una trabajadora de Gertek, la empresa gestora del servicio, explicaba a los usuarios que efectivamente, no hay previsión de multar al menos hasta el fin de semana. «Estamos volcando todos los datos de los vecinos que han solicitado las tarjetas de residentes y esperamos que el viernes puedan comprobarlo solo con poner la matrícula en la máquina», les explicaba en la calle Arturo Campión de San Ignacio a Aritz Rincón y Leizadi Fernández, que lo habían intentado ya varias veces sin éxito. También resolvía las dudas de José Díez, que el sábado se marcha un mes de vacaciones «y quiero quedarme tranquilo sabiendo que el coche se va a quedar en la calle pero no me van a multar», ha subrayado. Y la empleada le garantizaba que «si ha tramitado bien el abono anual, no va a tener ningún problema».

Eder Portillo e Izaskun Vidal paseaban con hijo pequeño y comentaban la gran cantidad de plazas vacías que se encontraban a su paso por la calle Orixe. «Si esta va a ser la tónica habitual, la medida merecerá la pena», subrayaba él, aunque al mismo tiempo reconocía que a partir de ahora tendrá que enfrentarse a un problema añadido que ya sufrían el resto de vecinos de Bilbao: «Uso habitualmente una furgoneta de empresa que aparco siempre al lado de casa, pero para ella no me dan una tarjeta, así que, o la aparco fuera de la zona de pago o alquilo una parcela de garaje, ¡vaya faena!».

Los dos, además, descubrían otro problema también generalizado en Bilbao. Viven en los límites de las zonas 14 (Ibarrekolanda) y 15 (San Ignacio). Eso significa que, si aparcan en la calle de al lado, tendrían que pagar la OTA, «o si bajamos al ambulatorio con el coche... ¿no se podía haber sido más flexible con estas cosas?».

Un poco más arriba, en la calle Txakolin, Olatz Ollo volvía por segunda vez a poner el ticket de la OTA en su Opel Focus C-Max gris. Aunque otras personas le comentaron que la intención del Ayuntamiento era no multar al menos al principio, ella prefería «curarme en salud. No suelo venir a Bilbao con el coche y, si hubiese aparcado en cualquier otro sitio con aparcamiento regulado habría pagado igual, así que me quedo tranquila, porque, además, la verdad es que he visto pasar varias veces al coche que se encarga de multar y no me fío».