º
Vecinos de Aperribai denuncian el grave estado de la pasarela «desde hace 25 años»Los residentes en este barrio de Galdakao se quejan de los baches, la «podredumbre» de la estructura y del acceso cortado a las escaleras
«Es una auténtica vergüenza, se cae a trozos», señalaba Iñaki Domínguez, vecino de Aperribai, tras atravesar la pasarela que cruza la carretera nacional. La ... opinión de todos los viandantes que utilizan este paso elevado es la misma y adjetivos como «ruina» o «despropósito» se repiten con asiduidad. Desde la asociación de vecinos de este barrio de Galdakao denuncian que llevan «25 años» luchando por un proyecto de renovación para un punto de acceso fundamental para sus habitantes, pero sus demandas han caído en saco roto y actualmente una posible actuación parece lejana.
Antes de su construcción, llegar o salir de Aperribai suponía un riesgo para sus vecinos. Una ingente cantidad de tráfico confluye en esa zona de la carretera N-364, un importante nudo de comunicaciones desde hace muchas décadas. Los vecinos comenzaron a movilizarse para exigir una paso seguro que pudiera evitar los numerosos casos de atropellos que se producían. La asociación aún conserva el documento que atestigua su petición a las autoridades competentes en 1967. Finalmente, la actual pasarela fue construida en la segunda mitad de la década de los ochenta.

El tiempo no ha pasado en balde y la estructura se encuentra en franca decadencia. Las escaleras de acceso están cortadas en uno de los lados por el peligro que suponen, los numerosos baches y resaltes dificultan el paso y provocan tropiezos y la podredumbre se aprecia en muchos puntos. «La única actuación que se ha hecho en estos años fue sustituir las barandillas, por que había riesgo inminente de que cayeran a la carretera», cuenta Susana Viteri, presidenta de la asociación. Actualmente todas ellas se encuentran cubiertas por una lona.
Cualquier obra de renovación que el Ayuntamiento, propietario de la pasarela, quiera acometer, debe recibir la aprobación de la Diputación, ya que la parte del espacio de la carretera que ocupa le pertenece. En 2015 se planteó un primer proyecto que no llegó a concretarse, y posteriormente se realizó otro, que fue aprobado el 30 de julio de 2021. Se habían elaborado incluso infografías de la nueva pasarela, pero al no lograr el permiso por parte de la Diputación, fue nuevamente descartado. Preguntados por posibles obras futuras desde el organismo foral señalan que estas «son competencia municipal» y que su papel se limita a «autorizar las actuaciones que quiera hacer el Ayuntamiento». Desde el Consistorio afirman que existen dos posibilidades. «O bien retirar esta y construir una nueva o bien arreglar la existente», explica el concejal de Urbanismo Asier Egiraun. El temor del equipo de gobierno es que en el caso de retirarla no reciban el permiso de construir una nueva por parte de la Diputación, por lo que la opción más factible parece el saneamiento de la pasarela actual.
Mientras las soluciones no llegan los vecinos contemplan la situación con preocupación. «Los bajos están podridos», apuntaba Carlos García. «Cualquier día sucede una desgracia», señalaba con resignación. «Parece que los de este barrio estamos olvidados», afirmaba Domínguez.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.