Dos sentencias enredan el pago de primas a los policías municipales jubilados

Las reclamaciones judiciales que están presentando los policías locales de la comarca, al suprimir los ayuntamientos las primas de jubilación al poderse retirar desde el año pasado con el 100% del salario, siguen dando sorpresas. Las dos últimas sentencias llegan desde el Ayuntamiento de Etxebarri y pueden suponer una baza para otros consistorios, ya que dos juzgados de lo contencioso-administrativo de Bilbao (los números 4 y 5) dan la razón a la institución local en el impago.

A pesar de que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco falló el pasado noviembre a favor de un agente en Basauri, donde la institución se enfrenta a pagos por valor de un millón de euros si recurre el resto, y admitió la compensación en el marco de un plan de rejuvenecimiento de la plantilla aprobado en 2002, el caso de Etxebarri es diferente. Los jueces entienden que no está demostrado la existencia de dicho plan. Y es que la institución local concedía las compensaciones en base al artículo 95 de Udalhitz, acuerdo que regula las condiciones de trabajo de los funcionarios en el País Vasco, pero no había aprobado en pleno el plan de rejuvenecimiento de la plantilla. Una cuestión que ahora podría extrapolarse a otros consistorios y suponer una vía de escape para las instituciones.

El Ayuntamiento de Etxebarri ha ganado de momento, en primera instancia, dos sentencias de dos agentes que reclaman 80.000 euros cada uno de ellos. El municipio cuenta con una plantilla joven en comparación con Basauri, donde ya han acudido a los tribunales ocho funcionarios y la reclamación puede poner en un serio brete a las arcas municipales. Ante el varapalo judicial –la institución está perdiendo todos los procedimientos– el Ayuntamiento basauritarra está intentando negociar con los sindicatos un acuerdo laboral que deje fuera del cobro a los policías.

En Etxebarri, los magistrados entienden que no cabe la reclamación porque el Consistorio no cuenta con un «plan de racionalización de recursos humanos» y, por tanto, no se demuestra que la jubilación anticipada deje una plaza vacante que vaya a ser posteriormente ocupada por otro agente. En una de las dos sentencias se puntualiza que «la regulación de los artículos 95 y 96 del Udalhitz no supone por sí mismo un plan de racionalización, sino que establece consecuencias económicas en aquellos ayuntamientos que se hayan dotado de un plan, lo que no ocurre en este caso», recoge el fallo. Por último, se toma en cuenta dos sentencias del Tribunal Supremo que dictaminan en otros puntos de España que las primas no pueden tener carácter retributivo y que únicamente deben corresponder con carácter asistencial y, por tanto, una pérdida económica.

Ante la inestabilidad de la situación y los quebraderos de cabeza que están padeciendo las instituciones locales por las reclamaciones de los uniformados, el Ayuntamiento de Etxebarri decidió precisamente en enero modificar el artículo 95 de Udalhitz. La institución local ponía limitaciones para que a partir de entonces no pudieran cobrar dichas primas ni los policías locales ni los trabajadores que se hubieran jubilado por alguna discapacidad. Estos últimos no sufren retenciones.

El alcalde, Loren Oliva, explicó que la modificación era necesaria porque «no se puntualiza que únicamente tengan derecho a las primas aquellos que pierden dinero». También se anunció que el Ayuntamiento aprobaría «como recomienda Eudel un plan de rejuvenecimiento y racionalización para los próximos cinco años».