Orduña apuesta por convertirse en un referente en el turismo de naturaleza

La Semana Santa es una época del año especial en muchos sentidos para Orduña. Lo es para sus habitantes, que viven con particular fervor las procesiones habituales en estas fechas, pero también para un turismo que ha crecido mucho en las últimas décadas. La pandemia, que durante tres años interrumpió las celebraciones propias de este periodo, fue un duro golpe en este ámbito y cortó de golpe lo que estaba siendo un incremento notable en el número de visitantes que recibía la ciudad vizcaína. Las estadísticas de la oficina de turismo dan fe de ello. Si en 2019 hubo 7.905 usuarios las cifras cayeron a 4.322 al año siguiente. La buena noticia llegó en 2023, donde se rozaron de nuevo los 8.000, aunque este último año experimentaron un notable bajón. Con el objetivo de dar un nuevo impulso, Orduña ha buscado implementar diferentes estrategias que potencien al máximo la belleza de su entorno y la conviertan en un lugar de referencia para el turismo de naturaleza.

La oficina de turismo, surgida hace dos décadas, es la encargada de organizar las principales actividades que oferta Orduña. Por un lado, ha puesto en valor su patrimonio histórico con las visitas guiadas por la ciudad medieval. Se realiza una cada sábado, y al estar subvencionadas por el área de promoción económica del Ayuntamiento no importa el número de personas inscritas para que se lleve a cabo. Por otro lado, han querido destacar la fauna autóctona con las salidas para la observación de aves, una de las actividades más demandas. Aprovechando los parajes naturales que rodean la ciudad, se organiza una ruta el tercer domingo de cada mes, con la excepción de enero y febrero, con hasta diez recorridos diferentes.

Para esta Semana Santa desde la oficina se ha organizado una programación especial llena de cultura, naturaleza y deporte con actividades como cursos de parapente, yoga en la naturaleza a o visitas guiadas al museo de la ciudad. Otro de los atractivos para el turista es la vía verde que une Orduña y Delika, recién inaugurada este miércoles. El corredor fluvial tiene una distancia total de 1.800 metros. Puede recorrerse tanto a pie como en bicicleta y para los visitantes supone una nueva oportunidad de conocer el entorno natural de Orduña.

«El año lo dividimos entre tres épocas: la Semana Santa, ekaina naturan y otoño gastronómico» cuentan desde la oficina de turismo. Durante la primera se organizan todo tipo de actividades, tanto culturales como aquellas relacionadas con la naturaleza. «La gente también suele aprovechar para ver el Salto del Nervión, porque la primavera es el mejor momento para disfrutarlo». Ekaina naturan está totalmente enfocado al medio, y los visitantes pueden disfrutar de deportes como marcha nórdica o baño de bosques. Por último en el otoño gastronómico «las actividades son similares pero se pone el foco en el producto local, ofreciendo hamarretakos y organizando visitas a la txakolinería o una vendimia nocturna».

Otro tipo de turismo que ha crecido notablemente en la última década es el de autocaravanas «especialmente a partir de la pandemia», destaca la técnica de promoción económica del Ayuntamiento Leire Albizuri. En el año 2020 el Ayuntamiento habilitó una zona aparcamiento provisional para estos vehículos en el parking de Nafarroa, pero ya se puso el foco en crear un espacio plenamente adaptado a su necesidades. Este se ha habilitado en el polígono la Rondina y puede albergar hasta diecisiete autocaravanas. Cuenta, además, con servicios de agua potable y luz, así como una zona para el vaciado de las aguas grises y negras.

En cuanto a su capacidad, Orduña cuenta con un hotel, seis apartamentos, cinco viviendas turísticas, dos casas rurales y un hostal, una amplia oferta de alojamientos que se adapta bien a la demanda habitual. «El objetivo es ganar cotas de turismo, pero no queremos que Orduña se masifique. Las actividades que ofrecemos buscan posicionar a Orduña dentro del turismo de naturaleza, pero están pensadas para que no sean de impacto para el medio» señalan desde la oficina. «Queremos que el turismo crezca, porque eso implica más riqueza, pero hacerlo de una forma sostenible».

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