El Museo Vasco se retrasa otro año más
El centro de arte reabrirá sus puertas en «mayo» de 2026 tras solventar los problemas estructurales que obligaron a elevar el presupuesto un 40%
Lo recalcó ayer en Bilbao la diputada general, Elixabete Etxanobe. El próximo 2026 «será el año de los museos en Bizkaia». Primero por la reinauguración ... del Bellas Artes, prevista para el 24 de junio.. Segundo porque el Euskalduna acogerá los Premios Europeos al Museo del Año. Y tercero, y aquí yace la última novedad, porque será también en 2026 cuando el renovado Museo Vasco de Bilbao, ubicado en la plaza Unamuno, vuelva a abrir sus puertas tras años de obras y encadenar retrasos y sobrecostes.
Noticia relacionada
Exposiciones semipermanentes y piezas artísticas de gran tamaño
El plan inicial era que la reinauguración tuviese lugar en 2023. Pero ya el pasado año, cuando se dio a conocer que el proyecto se encarecía un 40% para solventar una serie de obstáculos técnicos -el presupuesto supera los 20 millones de euros a repartir entre el Ayuntamiento y la Diputación-, se habló de abrirlo este julio. Pero ni una fecha ni la otra. Finalmente, será en «mayo» del ejercicio que viene cuando el centro de arte luzca su nuevo rostro. La fecha exacta la dio a conocer el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, durante una visita de obra al museo a la que también acudió la diputada general, la directora del centro, Sorkunde Aiarza; Raúl Escrivá, miembro del equipo de arquitectos que ha desarrolldo el proyecto, y personal técnico de la obra.
Los impulsores de la propuesta detallaron que la demora de los trabajos responde a la complejidad del proyecto, que une los cuatro edificios que componen el centro artístico, construidos en diferentes épocas y con hechuras y desniveles distintos: el colegio de los jesuitas, la antigua Casa de la Misericordia, el claustro y el bloque de la calle Cruz. Todo ello para que el renovado equipamiento cuente con más de 6.000 metros de capacidad, «el doble» que antes.
Avances de la obra

Aiarza explicó que el proyecto tuvo que ser adecuado para garantizar la estabilidad y seguridad de las diferentes estructuras. La responsable del Museo Vasco recordó que, además de los «trabajos de cimentación» realizados, también se tuvo que desmontar la fachada de la calle Unamuno para «evitar el riesgo de caída». Trabajos que «han quedado solventados» y que ha permitido que la obra entre en «la fase final de crecimiento», periodo en el que «los avances son más visibles».
Una muestra de que los trabajos avanzan a mayor ritmo es que ya se ha iniciado la colocación de elementos arquitectónicos, como el 'tronco ingrávido' del edificio Misericordia visitado ayer. Una estructura hueca de madera que representa el concepto que persigue el museo, que no es otro que ser un espacio dinámico, abierto y en constante evolución.
El objetivo de la reforma es convertir el centro en una seña de identidad del pueblo vasco, una puerta internacional a la cultura local. De ahí que los baserris, el euskera y las tradiciones configuren los ejes del discurso. Además, el techo se cubrirá con grandes cerchas de madera que rememoran a la construcción de las cubiertas de caseríos y barcos. «Un pueblo como el vasco, con una cultura e idioma propio, necesitaba un museo nacional como este. Somos una ciudad, pero sobre todo somos un pueblo, con identidad propia», defendió Aburto.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.