En Santurtzi aumenta en un 18% la demanda de ayuda social de alimentos

El hospital San Juan de Dios de Santurtzi continúa durante esta pandemia, a causa del Covid-19, con su proyecto de ayuda a personas en riesgo de exclusión social y familias sin recursos mediante el reparto de alimentos, en virtud de su colaboración con el Banco de Alimentos y el Ayuntamiento santurtziarra.

En el periodo de distribución comprendido entre los meses de marzo a julio de 2020, el hospital ha visto aumentada la demanda de este tipo de ayuda un 18%, pasando las personas receptoras de 182 en marzo, a 214 en julio. En cuanto al número de familias que se benefician, este ha incrementado desde las 77 registradas en marzo a las 89 del mes de julio. El perfil de las incorporaciones corresponde principalmente a personas con documento de emigración, el 50%, y mujeres, un 85%. Además, entre enero y julio de este año se ha incrementado en dos toneladas el peso total de los alimentos distribuidos respecto al mismo periodo de 2019. Pasando de los 11.000 kilos a casi 13.000.

Este proyecto va de la mano con la labor del Banco de Alimentos en el municipio, donde ha crecido a lo largo de estos meses el número de familias receptoras de la bolsa mensual de comida hasta un total de 814, lo que supone 100 familias más que antes del inicio de la pandemia. «Se trata, sin duda, de un trabajo conjunto entre entidades que vela por la protección de las personas más vulnerables», explica Itziar Carrocera, concejala de Acción Social del Ayuntamiento de Santurtzi.

«Estos datos pueden contribuir a reflejar una de las consecuencias del confinamiento, como es el impedimento del ejercicio de trabajos en la economía sumergida, sacando a la luz la situación de pobreza extrema y fragilidad de muchas personas y familias», asegura Mariano Bernabé, superior de la Comunidad de Hermanos de San Juan de Dios y coordinador del programa. «Una situación que se ha visto agravada por la crisis económica que atravesamos y que les ha encaminado a pedir ayuda a los servicios sociales de base, solicitando alimentos y alojamiento», añade. Asimismo, destaca el hecho de que, durante las últimas semanas, el hospital ha recibido ayuda de donantes particulares que han proporcionado alimentos para repartir. El religioso ha agradecido en nombre de los beneficiarios «la generosidad que han tenido, así como su sensibilidad y empatía con las personas de nuestro entorno, nuestros vecinos, a los que, como han hecho ellos, todos podemos ayudar de una manera fácil, económica y directa».